Mientras que ya existe numerosa evidencia sobre la retención de salarios, restricción de libertades, vigilancia política y sanciones por desertar, no se conoce la distribución exacta de los ingresos por país o misión, ni el destino final del dinero recaudado dentro de Cuba.
El gobierno de Estados Unidos actualizó esta semana el Memorando Presidencial de Seguridad Nacional NSPM-5, lo que reafirma la política de la Administración Trump en el endurecimiento del sistema de sanciones para «fomentar una Cuba libre y democrática».