MADRID, España.- Organizaciones del exilio, activistas y grupos de la sociedad civil dentro y fuera de Cuba preparan una jornada global de protestas para el 10 de diciembre, Día Internacional de los Derechos Humanos. La convocatoria busca exigir la liberación de los presos políticos y denunciar la represión del régimen, en un escenario marcado por el deterioro económico y el incremento de denuncias sobre abusos en prisión.
Entre los principales impulsores está el líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), José Daniel Ferrer, quien llamó a convertir la fecha en un reclamo mundial. En X escribió: “Este 10 de Diciembre, Día Internacional de los Derechos Humanos, cubanos por todo el planeta, alzarán sus voces exigiendo respeto a los #DDHH en nuestra Patria y la #Libertad de los Presos Políticos”. Ferrer también alentó acciones pacíficas dentro de la isla —como grafitis, cacerolazos y protestas relámpago— y pidió al exilio organizar concentraciones en ciudades donde residen comunidades cubanas.
El llamado ha sido respaldado por plataformas y organizaciones del exilio que promueven consignas como “Grito mundial por Cuba”, así como por activistas y exprisioneros políticos que se han sumado en redes sociales. Cuba Decide, liderada por Rosa María Payá, difundió su apoyo con el mensaje: “¡Nos vemos el 10! Apoyamos la convocatoria a manifestarnos mundialmente por los derechos humanos para los cubanos. Libertad para los presos políticos. Libertad para Cuba”.
Las concentraciones se multiplican en América, Europa y Canadá. Según un registro público compilado por el activista Norges Rodríguez, las convocatorias incluyen ciudades como Miami, Washington, Toronto, Montreal, Madrid, Valencia, Tenerife, París, Estocolmo y Santiago de Chile, además de otros puntos donde la diáspora mantiene una presencia activa. En Costa Rica, por ejemplo, cubanos residentes en San José anunciaron una protesta por el “fin de la dictadura” para este día.
Dentro de Cuba, activistas independientes han expresado su intención de participar, aunque en años anteriores el Gobierno ha respondido a convocatorias similares con operativos policiales y detenciones para impedir manifestaciones pacíficas.
La jornada de 2025 se suma a una dinámica creciente de movilizaciones desde el 11 de julio de 2021. En 2024 se registraron marchas y vigilias en cerca de 20 ciudades durante el Día de los Derechos Humanos. Este año, el exilio espera que el 10 de diciembre se convierta en un nuevo impulso internacional para exigir justicia, visibilizar la represión y reclamar libertad para los presos políticos en Cuba.
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