LA HABANA, Cuba – Ubicado en el municipio habanero de San Miguel del Padrón, el centro penitenciario 1580 ha sido fuente constante de denuncias sobre malos tratos, corrupciones y violaciones de derechos humanos, sobre todo negación de atención médica. El preso político Adrián Curuneaux Stivens, confinado desde el pasado año en esa cárcel, confirmó a CubaNet que quien exige atención médica allí puede recibir abusos físicos por parte de las autoridades penitenciarias.
El activista, condenado a un total de 11 años de privación de libertad por los supuestos delitos de atentado, desacato y agresiones, describió a través de una misiva cómo recientemente tras levantarse con el rostro inflamado, el Funcionario de Orden Interior (FOI) conocido como El Duque lo golpeó y envió a un calabozo por exigir que lo atendiera un médico.
“Estaba tan inflamado que no me reconocía. A las 5:20 A.M. le pido atención médica al FOI conocido como El Moro y él me dice que es muy temprano. Dos horas después cuando volví a llamarlo me percato que habían cambiado la guardia y estaba El Duque. Él acude a mi llamado, le explico mi problema y me responde que por gritar y por su órgano reproductor no me iba a llevar al médico”, relató el opositor.
De acuerdo con Curuneaux Stivens, tras seguir gritando para que lo llevaran al puesto médico, El Duque lo saca del destacamento, lo esposa con las manos detrás y comienza a levantarle los brazos hacia arriba, inclinándole el rostro hacia el piso.
“Esa posición ellos la llaman carretilla. Luego me pone la cara contra la pared, golpeándome contra la misma repetidamente, me llevó a un calabozo y me enganchó las esposas a una cabilla que ellos tienen como medio de tortura. Ahí estuve como una hora, luego llegó la teniente María Lina y ella fue la que le ordenó que me llevara al médico; él, bajo protesta, tuvo que llevarme”, detalló el activista, vicepresidente del Movimiento Opositores por una Nueva República.
Denuncia de Reinaldo Martínez Lemes
A través de una carta enviada a CubaNet, el interno Reinaldo Martínez Lemes denunció “a la Dirección de la prisión 1580, bajo el mando de Lexis Borrero Ramírez” por la violación de sus derechos humanos y la negación de atención médica.
De acuerdo con el escrito, a Martínez Lemes, quien se encontraba de licencia extrapenal por un año y está operado del corazón, las autoridades penitenciarias le niegan ingresarlo “en el Hospital Nacional para recibir otra cirugía”.
“En vez de atención médica lo único que he recibido es maltrato psicológico. Me han negado ese derecho desde que estoy aquí. Ya estoy hinchado completo, hasta mi parte interior y me falta el aire todos los días, pero ni siquiera nos sacan a coger el sol a los adultos mayores”, relató.
“En el colectivo #16 de la 1580, donde hay adultos mayores, inválidos, un ciego y yo, que estoy operado del corazón, se violan todos los derechos humanos. Hace poco un guardia me ofendió con mi madre al llamarlo para ir al puesto médico”, agregó el recluso.
Denuncia de Roberto Bárbaro Molinas Gasborí
El recluso Roberto Bárbaro Molinas Gasborí confirmó también a través de una pequeña nota cómo le han negado atención médica desde hace tres meses, tiempo durante el cual ha padecido de una fisura rectal.
“En ocasiones cuando la he exigido lo que he recibido ha sido maltrato por parte de los FOI o llaveros. En una ocasión fui golpeado en el rostro con un bastón por parte de los guardias El Duque y Ramón, los más corruptos que tiene la 1580, o mejor dicho, “El Secadero”, dirigido por el teniente coronel Lexis Borrero Ramírez”, denunció.
Las autoridades de la 1580 prohibieron la entrada de hojas y libretas a la prisión debido al consumo y tráfico de drogas dentro del penal, lo que dificulta la salida de denuncias sobre negación de atención médica y violación de derechos humanos de manera general.
Según un informe anual del Centro de Documentación de Prisiones Cubanas publicado el pasado mes de octubre, entre marzo de 2024 y marzo de 2025 se registraron 1 330 violaciones de los derechos humanos de personas encarceladas.
“Las violaciones más frecuentes documentadas incluyen hostigamiento y represión con 1,176 incidentes, seguidos por 555 denuncias sobre problemas de salud general, 454 casos de negación de atención médica, 341 relacionados con condiciones inadecuadas de vida y 260 referidos a deficiencias alimentarias”, detalló el documento.
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