LA HABANA, Cuba. — La Conferencia de Obispos Católicos de Cuba (COCC) anunció este viernes la llegada de aviones con ayuda humanitaria para las diócesis más afectadas por el huracán Melissa, procedentes de la Arquidiócesis de Miami.
Según la nota informativa de la COCC, se recibió ya un avión con recursos para la Arquidiócesis de Santiago de Cuba. Además, este sábado, 15 de noviembre, llegará otro avión a Holguín para ayudar a los afectados de esa provincia. El documento también indica que, más adelante, se esperan otros dos aviones: uno para la diócesis de Guantánamo–Baracoa, y otro para Bayamo–Manzanillo.
La conferencia episcopal precisa también que “en las próximas semanas, se espera poder concretar la ayuda ofrecida por la Administración de los Estados Unidos, cuya tramitación y distribución se realizará con la colaboración de las Cáritas de ambos países”.
En la nota, los obispos de las diócesis afectadas por el huracán Melissa expusieron ante la asamblea “las difíciles situaciones que están viviendo y al mismo tiempo, los gestos de ayuda y caridad que han estado recibiendo desde los primeros momentos del impacto del ciclón”.
Los obispos subrayaron su gratitud hacia quienes han enviado recursos desde el exterior y hacia las autoridades que han facilitado su llegada y distribución: “Los Obispos Católicos de Cuba agradecen a todos los que, con prontitud y generosidad, han vuelto a mirar con afecto a este pueblo y están contribuyendo a mitigar tanto dolor”.
Por otro lado, este miércoles trascendió que Mike Hammer, jefe de Misión de Estados Unidos en Cuba, se había reunido con obispos de la región oriental “para entender mejor las necesidades de la población después del huracán Melissa y para coordinar los $3 millones de asistencia humanitaria que el Gobierno EE.UU. está proporcionando directamente a los cubanos más afectados”.
Previamente, el Departamento de Estado había anunciado que Washington, en coordinación con la Iglesia Católica, distribuiría 3 millones de dólares en ayuda humanitaria “directamente a las personas del oriente de Cuba más afectadas por la devastación del huracán Melissa”.
En paralelo, el Gobierno cubano informó que aceptaría el ofrecimiento, canalizado “por vía del Servicio Católico de Ayuda de Estados Unidos”, pero subrayó que esa cooperación se ha materializado “exitosamente en plena coordinación” con las autoridades de la Isla. “Se agradecen estos gestos humanitarios”, añadió el comunicado reproducido por el diario oficial Granma.
El vice primer ministro y titular del MINCEX, Oscar Pérez-Oliva Fraga, declaró el pasado martes que, respecto al aporte estadounidense de 3 millones de dólares, “nada se ha recibido ni concretado”. En esa misma intervención detalló que las agencias de la ONU y unos 27 países han remitido insumos y equipos para la respuesta inicial.
La COCC también ha informado que mantiene “conversaciones útiles y positivas con todas las partes” para hacer efectiva la entrega, en el marco de una “situación catastrófica” en las diócesis orientales.








