LA HABANA, Cuba. – De “inhumanas” y “deplorables” calificó las condiciones en las que vive Lázaro Yunier del Castillo Bringuier, un padre cubano que quedó al cuidado de sus seis hijos porque su madre ha intentado quitarles la vida varias veces. La mujer actualmente está internada en la sala de psiquiatría del Hospital Clínico Quirúrgico “Julio Trigo López”, en Arroyo Naranjo.
El cubano, de 38 años, reside junto a sus seis hijos en el albergue Solidaridad, una antigua escuela convertida en viviendas de tránsito para personas que perdieron sus hogares por diferentes desastres. Aunque los actuales residentes fueron llevados al lugar de manera temporal, hay familias que han residido allí por más de 10 años, según confirmó el propio Castillo Bringuier.
Al acceder a su hogar, el entrevistado muestra a CubaNet un enorme local con huecos ―donde hubo ventanas― cubiertos con nailon y cartón. “Aquí no hay condiciones para vivir con seis niños”, explicó el hombre, que reside desde hace más de siete años en el albergue sito en el poblado de Las Guásimas, en Arroyo Naranjo.
Según denuncia, a las pésimas condiciones en que reside se suma además la falta de agua potable. Para proveerse del líquido, Castillo Bringuier debe bajar y subir tres pisos cargado de cubos.
“Se reportó y se reportó [la falta de agua], pero nada; a la jefa de albergue no le interesa esto. Entonces, sales para la calle formas un escándalo, y al momento viene todo el mundo [representantes de instituciones estatales]. Aquí hay más de 50 niños y mujeres embarazadas, y hay que bajar a cargar los cubos de agua”, insiste.
No obstante, Castillo Bringuier resaltó que su principal temor recae sobre el peligro que representa para la vida de sus hijos su propia madre, Dariannis Silvera, la cual ha intentado agredirlos con cuchillos e incluso, hasta lanzarlos desde el tercer piso del inmueble. “Ahora está ingresada en el Julio Trigo, pero no sé cómo se las arregló y me envió un mensaje diciéndome que se iba a fugar. En otras ocasiones ya lo ha hecho”, contó.
De acuerdo con Castillo Bringuier, desde septiembre él y su madre, abuela de los menores, interpusieron una denuncia contra la mujer en la estación policial El Capri, en Arroyo Naranjo. Sin embargo, las autoridades no han hecho nada al respecto, dice.
“Es la vida de mis hijos la que está en peligro, no es la de ningún jefe, no es la de ningún dirigente del Gobierno, ni la de un policía, por tanto quiero soluciones”, sentenció el hombre.
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