MADRID, España.- La líder opositora venezolana María Corina Machado arribó a Oslo en la madrugada de este jueves, tras permanecer más de un año en la clandestinidad. Su llegada se produjo después de una travesía clandestina que incluyó una salida en bote desde las costas venezolanas hasta la isla de Curazao, según reveló The Wall Street Journal, como parte de una operación diseñada para proteger su seguridad.
El presidente del Comité del Premio Nobel, Jørgen Watne Frydnes, citado por diversas agencias internacionales, explicó que Machado a su llegada no tendría compromisos oficiales inmediatos y que su prioridad al llegar a Noruega es estar con su familia. “En camino hacia aquí, pero irá directamente a reunirse con su familia… no habrá reuniones hoy. Mañana volveremos con el programa”, afirmó el presidente del Comité. Minutos después, la propia Machado confirmó su arribo con un breve video en redes sociales: “¡Oslo, aquí estoy!”.
Declaraciones en Oslo
Tras su arribo, en una rueda de prensa ofrecida junto al primer ministro noruego, Jonas Gahr Støre, la dirigente venezolana reafirmó su postura política y su visión sobre el futuro democrático de su país. “La esperanza de que Venezuela volverá a ser libre”, dijo, y agregó que los venezolanos convertirán el país en un “faro de esperanza, una oportunidad para la democracia”.
Durante su intervención, subrayó que “para tener paz se necesita democracia… pero no se puede tener democracia sin libertad”.
Preguntada sobre una posible intervención militar en su país, Machado recordó que la sociedad venezolana ha dado todo por una transición en orden y paz. “Quien ha dado la guerra es el régimen de Nicolás Maduro”, dijo. Explicó que la dictadura venezolana se apoya en regímenes de otras partes del mundo como Cuba, Rusia y grupos terroristas como Hamas y Hezbollah, “y así como el régimen se apoya en los regímenes del mundo, nosotros necesitamos que las democracias del mundo apoyen a los venezolanos”.
Encuentro con María Elvira Salazar
Uno de los momentos más destacados fue el emotivo encuentro con la congresista cubanoamericana María Elvira Salazar, quien viajó a Noruega como parte de una delegación internacional para respaldar a la dirigente venezolana. La legisladora compartió en sus redes sociales el abrazo entre ambas, acompañado del mensaje: “Después de 16 meses escondida, aquí está: libre, firme y de pie. María Corina es indoblegable”.
El respaldo internacional también incluyó reuniones previas de Salazar con la hija de Machado y la presencia en Oslo de líderes políticos de Panamá, Argentina, Ecuador, Paraguay y del congresista por el estado de Florida Carlos Giménez, quien calificó la ocasión como “un recordatorio contundente de lo que realmente es el coraje”.
Machado reaparece en público por primera vez en casi un año, tras haber sido inhabilitada para participar en las elecciones presidenciales venezolanas de 2024, en las que había arrasado en las primarias opositoras. La candidatura finalmente recayó en el exdiplomático Edmundo González, considerado por la oposición y observadores internacionales el verdadero ganador de los comicios frente al mandatario Nicolás Maduro, pese a que las autoridades electorales venezolanas no publicaron las actas de votación.
La llegada de la opositora coincidió con los actos posteriores a la entrega del Premio Nobel de la Paz 2025, otorgado por su papel en la defensa de la democracia frente al avance del autoritarismo en Venezuela. Machado no pudo llegar a tiempo el miércoles a la ceremonia oficial en el Ayuntamiento de Oslo debido a las dificultades para abandonar su país, por lo que el diploma y la medalla fueron recibidos por su hija, Ana Corina Sosa Machado, quien también leyó el discurso preparado por su madre.








