LIMA, Perú – Unos 32 incendios de motos eléctricas fueron registrados en la provincia de Villa Clara entre enero y octubre de este año, según informó el teniente coronel Ernesto Lima Guevara, jefe de Operaciones del Cuerpo de Bomberos.
En declaraciones a la estatal Agencia Cubana de Noticias, el directivo aseguró que la causa fundamental de esos incidentes era el manejo deficiente y las reparaciones inapropiadas de baterías de motos eléctricas, sumados a la ausencia de buenas prácticas.
Con un total de 20 incendios, el sector residencial resultó el más afectado en la central provincia, seguido por 10 ocurridos en la vía pública y dos en instituciones estatales.
“La situación más compleja radica en las pérdidas para la ciudadanía, valoradas en aproximadamente 95 millones de pesos”, señala el teniente coronel.
Por su parte, el jefe de la unidad técnica de prevención de incendios del Cuerpo de Bomberos de Villa Clara, Jorge García Arbelo, ratificó que la causa principal de estos siniestros es la combinación de la negligencia del usuario y las reparaciones inadecuadas de las baterías, especialmente en motocicletas.
Luego de usar las motos eléctricas, recordó, la batería está caliente y necesita un periodo de enfriamiento de aproximadamente 30 minutos antes de conectarla a la carga.
García Arbelo también resaltó la importancia de respetar los tiempos de carga recomendados por cada fabricante. “Usualmente es entre siete y ocho horas, superando este tiempo, se incrementa significativamente el riesgo de sobrecalentamiento”, dijo.
Otros factores de riesgo relacionados a los incendios referidos por las autoridades incluyen la exposición prolongada al sol, mojar la batería al lavar la motocicleta, el uso de extensiones eléctricas en mal estado y, sobre todo, las reparaciones informales.
Los vehículos eléctricos se han vuelto un medio popular en la Isla ante la crisis de la movilidad y el fallo del transporte público.
En julio pasado, el régimen cubano reconoció durante las sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular, la magnitud de la crisis que atraviesa el transporte público en el país, al admitir que apenas se cumplió el 68 % del plan de transportación de pasajeros en lo que va de año. Ello implica que más de 400 millones de viajes previstos no llegaron a realizarse, una cifra que evidencia el colapso operativo del sector.