MADRID, España.- Una nueva jornada crítica amenaza con llevar a Cuba a un apagón general, tras una serie de fallas en instalaciones clave del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) que comprometen gravemente la ya frágil capacidad de generación del país.
Según informó el periodista oficialista Lázaro Manuel Alonso, una avería en la línea de 110 kilovoltios de la patana de Melones provocó en la madrugada del jueves la salida de servicio de esta planta flotante, así como de la unidad 5 de la termoeléctrica de Mariel, el emplazamiento de Boca de Jaruco y una unidad de Energás Varadero. En total, se perdieron de forma abrupta unos 400 MW de potencia.
Aunque se ha logrado reincorporar una batería de Melones y tanto Mariel como Boca de Jaruco están en proceso de arranque, la situación sigue siendo extremadamente tensa. La unidad de la central termoeléctrica Antonio Guiteras, una de las más importantes del país, se espera para mañana, pero aún no está en línea.
Para el horario pico de este jueves por la noche, la Unión Eléctrica pronostica una afectación de 2065 megawatts (MW), cifra superior incluso al récord registrado el pasado martes 15 de julio, cuando el país alcanzó el mayor déficit de generación reportado hasta la fecha: 2020 MW a las 10:00 p.m.
Este nuevo episodio evidencia la inestabilidad creciente del SEN y refuerza los temores de un apagón general, ante una demanda energética que supera con creces la capacidad real de generación disponible.
En lo que va de año ya han ocurrido dos apagones generales en el país, uno en febrero y otro en marzo, lo que confirma la fragilidad estructural del sistema eléctrico cubano.
Durante casi una semana de octubre de 2024, gran parte de Cuba enfrentó apagones casi absolutos, en lo que fueron los peores cortes eléctricos registrados en décadas.
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