MIAMI, Estados Unidos. – El anuncio público del secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, de “ofrecer ayuda humanitaria inmediata al pueblo cubano” tras el paso del devastador huracán Melissa desató respuestas encontradas entre funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX) de la Isla: mientras un viceministro confirmó contactos con Washington para conocer detalles de la propuesta, otras figuras de la Cancillería y hasta “cibercombatientes” condicionaron cualquier asistencia al levantamiento de sanciones y a la salida de Cuba de la lista estadounidense de patrocinadores del terrorismo.
Este jueves, Rubio anunció en X la disposición de su gobierno a brindar ayuda al pueblo cubano.
“Tras la devastación causada por el huracán Melissa en el este de Cuba, el Gobierno de Trump se solidariza con el valiente pueblo cubano, que sigue luchando para satisfacer sus necesidades básicas. Al igual que en los países vecinos del Caribe, el Departamento de Estado emite una Declaración de Necesidad Humanitaria para Cuba y está preparado para brindar asistencia humanitaria inmediata, tanto directamente como a través de socios locales que puedan distribuirla con mayor eficacia a quienes la necesitan”, confirmó el Departamento de Estado en un comunicado.
In the wake of Hurricane Melissa’s devastation of eastern Cuba, the Trump Administration stands with the brave Cuban people who continue to struggle to meet basic needs.
— Secretary Marco Rubio (@SecRubio) October 30, 2025
The United States is prepared to provide immediate humanitarian assistance directly and via local partners…
Asimismo, la entidad especificó que la legislación de EE.UU. contemplaba “exenciones y autorizaciones para las donaciones privadas de alimentos, medicinas y otros bienes humanitarios a Cuba, así como para la respuesta ante desastres” y animó a quienes desearan “apoyar directamente al pueblo cubano” a ponerse en contacto.
Poco después de trascender el anuncio, el viceministro del MINREX Carlos F. de Cossío confirmó en X gestiones con Washington: “A raíz de comunicaciones públicas del día de hoy sobre los daños del huracán, hemos entrado en contacto con el Departamento de Estado y estamos en espera de precisión sobre cómo y en qué manera están dispuestos a ayudar”.
El mensaje fue respondido por Juan Antonio Fernández Palacios, embajador del régimen cubano en el Reino de Bélgica y ante la Unión Europea, quien apuntó: “Nada de limosnas ni condicionamientos. La comunidad internacional, de manera abrumadora, ha dicho lo que tienen que hacer. Nada más que decir”. El funcionario aludía a la resolución aprobada este miércoles en la Asamblea General de la ONU, donde 165 Estados miembro votaron por que se pusiera fin al embargo de Washington a La Habana.

También respondió Josefina Vidal, otra de las viceministras del MINREX y una de las figuras más visibles durante el llamado deshielo entre Cuba y Estados Unidos: “Llegó la hora de la verdad. Estaremos muy atentos”, escribió.
Mucho menos receptiva fue su colega, la vicecanciller Anayansi Rodríguez Camejo, quien reclamó excepciones humanitarias al embargo antes de cualquier ayuda: “Si el Gobierno de Estados Unidos tiene alguna mínima preocupación por ‘ayudar al pueblo cubano’ suspenda o haga excepciones humanitarias al bloqueo con motivo de los daños que ocasionará y está ocasionando el huracán Melissa”, escribió en X.
La línea de rechazo fue reforzada por Roberto Morales Ojeda, miembro del Buró Político y secretario de Organización del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC): “Indigna ofrecimiento de ayuda a damnificados por huracán del secretario Marco Rubio. Si fuera sincera voluntad de ese gobierno de apoyar a nuestro pueblo, habrían levantado sin condiciones el criminal bloqueo y eliminado de lista de Estados patrocinadores del terrorismo, donde nunca debimos estar”.

Por su lugar en el Comité Central del PCC, la postura de Morales Ojeda puede asumirse como la más cercana al régimen de la Isla.
Además de los mensajes de altos cargos, cuentas progubernamentales conocidas como “ciberclarias” o “cibercombatientes” amplificaron el encuadre oficial contra el ofrecimiento. En un aparente intento de quitar valor al ofrecimiento, el l bot identificado como Pedro de la Rosa Sánchez, que se identificó como parte del grupo #DeZurdaTeam, escribió: “Viene la supuesta oferta de ‘ayuda humanitaria al pueblo cubano afectado por el huracán’ lanzada por el secretario de Estado Marco Rubio, quien ha sido el principal defensor del bloqueo económico contra la Isla”.
Varias investigaciones sitúan a la red #DeZurdaTeam como un entramado coordinado de perfiles que impulsa etiquetas y narrativas progubernamentales en X. En coyunturas similares, este ecosistema ha sido documentado por el Observatorio de Internet de Stanford y medios cubanos independientes por su papel de propaganda y acoso digital.
Aunque La Habana no ha difundido aún un parte oficial completo, agencias internacionales dan cuenta de daños severos tras el paso del ciclón por el Caribe y confirman el despliegue de equipos de respuesta de Estados Unidos en países vecinos.
En definitiva, Washington ofreció ayuda y La Habana, hasta ahora, no ha aceptado. Aunque solo cumplen órdenes, ahora parece que todo depende del viceministro que prevalezca. Su jefe, el canciller Bruno Rodríguez Parrilla, aún hace silencio.








