El artivista Luis Manuel Otero Alcántara, uno de los opositores al régimen cubano más prominentes de los últimos años, cumple este martes 2 de diciembre 38 años en la que sería la segunda jornada de un nuevo ayuno voluntario en la cárcel de máxima seguridad donde purga cinco años de prisión política, según informó su círculo cercano a través de redes sociales.
Se trata de otro “gesto de denuncia frente a su injusto encarcelamiento y la crisis de derechos humanos que atraviesa Cuba”, indicó el comunicado que firman las curadoras e historiadores de arte Claudia Genlui y Yanelys Núñez, quienes subrayaron: “Este [es] el quinto cumpleaños consecutivo que pasa en prisión, separado de su familia, de su vida y de su obra. Cinco años en los que el Estado cubano le ha arrebatado tiempo, proyectos, afectos y libertad”.
Como parte de su protesta, Otero Alcántara se ha negado a recibir visitas de sus familiares este día de su cumpleaños en la penitenciaría de Guanajay, Artemisa, donde fue recluido tras su detención el 11 de julio de 2021 –durante el estallido social que fue reprimido y judicializado duramente por el Estado– y el juicio en que, a fines de junio de 2022, fue condenado junto a su compañero, el rapero disidente Maykel Osorbo Castillo Pérez, por los delitos de “ultraje a los símbolos de la patria, desacato, difamación de las instituciones y organizaciones y de los héroes y mártires, atentado, resistencia y desórdenes públicos”.
“Luis no ha recibido ningún beneficio penitenciario: ni libertad condicional, ni rebajas. Según ellos, no se ha «reeducado», como si alguien como Luis Manuel pudiese quitarse sus convicciones y su identidad y guardarlas en una gaveta hasta que el contexto no sea hostil o peligroso”, indica otra nota publicada hace pocas horas en las redes sociales del líder del Movimiento San Isidro. “Luis no se va a «reeducar» y seguirá dando guerra con 35, con 38 y hasta el fin de sus días, porque le sobra fuerza, y porque le sobran los amigos y colegas que le apoyan”.
En efecto, el gobierno cubano desestimó, por ejemplo, una petición de libertad condicional en febrero de 2024, tan pronto como Otero Alcántara era elegible para ello.
“Su situación no es aislada. Hoy existen más de 1.700 presos políticos en Cuba, víctimas de un sistema represivo que continúa encarcelando a artistas, activistas, periodistas, jóvenes y ciudadanos que exigen derechos básicos y ante todo un cambio de sistema para Cuba que ofrezca derechos y libertades a sus ciudadanos. Mientras tanto, el país atraviesa la peor crisis económica, social y humanitaria de su historia reciente”, se enfatiza en el primer mensaje citado, en el cual se cita el caso de otro preso político cubano, Yosvany Rosell García Caso, quien acaba de deponer –según indica la organización Cubalex, tras haberlo confirmado su esposa– una huelga de hambre de 40 días y cuyo estado de salud continúa siendo “crítico”.
“¿Cuánto más deben perder los cubanos? ¿Cuánto más está dispuesta la dictadura a arrebatarles antes de que el mundo reaccione?”, se interpelaba la víspera en nombre del artista visual del barrio habanero de San Isidro. “Hoy estamos contigo, Luis, con Yosvany Rosell y su familia, con José Antonio Pompa López, y con todos los presos políticos cubanos”, se allí este martes.


