El fotógrafo cubano Arien Chang presentará en Nueva York su primer fotolibro, Prepositions: A Cuban Photographic Journey, y la cita es el próximo jueves 16 de octubre, a las 7:00 p.m. (hora local), en la sede del Thomas Nickles Project (47 Orchard St., NY 10002).
Allí dialogará sobre este volumen y, en general, sobre el arte fotográfico con la comisaria y crítica Mailyn Machado, quien escribió el ensayo que acompaña una selección de imágenes en blanco y negro tomadas durante más de una década en su país natal.
“El libro es una narración visual de un día en Cuba, desde el amanecer hasta el anochecer”, han adelantado los organizadores de la velada.
“Entre 2003 y 2015, Chang documentó la vida cotidiana de los cubanos, principalmente en La Habana, pero también en algunas de las regiones más remotas de la isla”, se lee en la web de la galería neoyorquina. “A través del viaje que propone el libro, nos encontramos con una Cuba que, como escribió Roland Barthes sobre la esencia de la fotografía, «ha sido»: una Cuba que, en el momento en que se tomaron estas fotos, existía tal y como muestran sus imágenes, pero que ya no existe”.
No quedará fuera de esta charla de presentanción la experiencia del fotógrafo como emigrante en Nueva York, y cómo esa circunstancia ha influido en su trabajo.
Desde allá, a lo largo del último lustro, han continuado llegando sus fotografías también gracias a medios cubanos independientes como, por ejemplo, la revista El Estornudo, para la cual documentó los embates de la pandemia de coronavirus o las masivas protestas del movimiento Black Lives Matters.
No es la primera vez que Chang –cuyas fotografías pueden encontrarse en colecciones de España, Bolivia, Alemania, Dinamarca, México, Brasil, China y Estados Unidos– colabora con Thomas Nickles Project, un espacio que ya acogió a inicios de 2022 su serie A base de viandas. Y también más recientemente…
“La fotografía de Chang muestra su fascinación y necesidad de registrar las complejidades de su entorno”, señala TNP, que sitúa la obra de Chang dentro de “una fuerte tradición documental” propia de la isla caribeña, si bien ha estudiado concienzudamente a fotógrafos asociados a la célebre agencia Magnum Photos.
“Su propia práctica desplaza el foco hacia historias individuales, el mundo subterráneo y las expresiones personales que definen el tejido social y cultural de Cuba”, subraya la galería. “Explora áreas de la sociedad cubana que generalmente se ignoran en la fotografía documental cubana. Temas como el rodeo, la cultura gay y el culturismo se reflejan en su obra”.