AREQUIPA, Perú – El régimen chavista en Venezuela arremetió este jueves contra el Centro Carter, una de las pocas instituciones internacionales a las que el dictador Nicolás Maduro permitió observar las elecciones y que ha dado como ganador al candidato de la oposición Edmundo González Urrutia.
Yván Gil,canciller venezolano, acusó a la institución estadounidense de apoyar un “golpe de Estado”,luego de que esta afirmara haber analizado datos que confirman que el ganador no fue Maduro, como proclamó el Consejo Nacional Electoral (CNE) el 29 de julio.
“Una vergüenza colocar a esa institución en el plan de golpe de Estado, apoyando la ejecución de los delitos electorales más rastreros que hayamos visto en la era republicana de Venezuela, cometidos por las hordas fascistas”, escribió el canciller en X (antes Twitter).
Asimismo, Gil arremetió contra Jennie Lincoln, jefa de la misión de observación en Venezuela, a quien calificó de “asalariada del Departamento de Estado”, semanas después de que diversas autoridades del régimen la recibieran entre elogios.
“La Sra. miente descaradamente, ninguna de sus palabras se corresponde con la realidad ni la legalidad venezolana”, indicó el canciller, en referencia a las recientes declaraciones que ofreció Lincoln a la agencia AFP.
La directiva del Centro Carter dijo al medio quela victoria fue de González Urrutia y señaló la falta de evidencia de un jaqueo en el sistema electoral, lo que causó retraso en el proceso, según denunció el CNE.
La embestida chavista se produjo también luego que el Centro Carter afirmara tras los comicios que no podía verificar los resultados, señalando la “ausencia de transparencia” del CNEen la difusión de los resultados.
La institución ya había declarado el pasado 30 de julio que las votaciones presidenciales celebradas en Venezuela no cumplieron con los estándares internacionales de integridad electoral y, por lo tanto, “no pueden considerarse democráticas”.
Destacó también que el proceso no se ajustó a los “parámetros y estándares internacionales para procesos electorales”.
Libertades restringidas y condiciones desiguales para la oposición
El Centro Carter, que ha sido observador en más de 100 elecciones en 43 países, participó en la observación de estas elecciones con 17 observadores, invitados por el propio régimen venezolano.
En su declaración inicial, la institución se refirió al entorno de libertades restringidas en el que se desarrollaron los comicios, afectando a actores políticos, organizaciones de la sociedad civil y medios de comunicación. Además, se observó una clara parcialidad, por parte del CNE, a favor de Nicolás Maduro.
La inscripción de votantes se vio comprometida por plazos cortos y falta de información pública, mientras que los ciudadanos en el extranjero enfrentaron requisitos legales excesivos que les privaron de sus derechos.
En cuanto a la campaña electoral, el Centro Carter señaló condiciones desiguales entre los candidatos. La campaña de Maduro fue bien financiada y ampliamente visible, mientras que el principal candidato de la oposición, Edmundo González, recibió poca cobertura mediática.
Además, las autoridades intentaron restringir las actividades de la oposición mediante acoso e intimidación, denuncia el documento.
La organización con sede en Atlanta apuntó también que el día de las elecciones, a pesar de que los ciudadanos acudieron en gran número y de manera pacífica, los esfuerzos de los observadores fueron socavados por la falta de transparencia del CNE.
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