CIUDAD DE MÉXICO, México.- El presidente de Colombia, Gustavo Petro, y su homólogo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, aseguraron la tarde de este miércoles que propusieron formalmente a Nicolás Maduro un pacto democrático entre el gobierno de Venezuela y la oposición para garantizar que el perdedor de las próximas elecciones presidenciales esté protegido de cualquier tipo de persecución política.
De acuerdo con el medio Infobae, se trata de un plebiscito a realizarse el próximo 28 de julio para garantizar un “pacto democrático”.
“Hemos hablado también de Venezuela, hoy es noticia”, dijo Petro en su comparecencia. “Queremos transmitirle con el presidente Lula una propuesta que fue transmitida al presidente Maduro y a la oposición. Se trata de una posibilidad de plebiscito en las elecciones que se avecinan, que garantice un pacto democrático”, añadió.
“Queremos garantizar para cualquiera que pierda en esas justas electorales certeza y seguridad sobre su vida, sobre sus derechos, sobre las garantías políticas que cualquier ser humano debe tener en su respectivo país”, dijo.
Además, animaron a Venezuela y Guyana a continuar su diálogo en el marco de la Declaración de Argyle y reiteraron su apoyo para que las partes alcancen soluciones diplomáticas.
Sus declaraciones se producen en el marco de la visita oficial a Bogotá de Luiz Inácio Lula da Silva, que asistirá a la inauguración de la 36° edición de la Feria Internacional del Libro de Bogotá -FILBo-, que cuenta con Brasil como país invitado de honor, y participará en el cierre del Foro Empresarial Brasil-Colombia, promovido por ApexBrasil y ProColombia.
Las autoridades venezolanas anunciaron que las elecciones nacionales se celebrarán el 28 de julio, coincidente con el natalicio del dictador Hugo Chávez. Mientras tanto, la favorita de la oposición, María Corina Machado, sigue vetada del proceso electoral por las hordas chavistas.
La decisión sobre la fecha se produce un mes después de que el máximo tribunal del país impidiera a la principal candidata de la oposición participar en las elecciones, lo que llevó a muchos a preguntarse, una vez más, hasta qué punto serían libres y justas las elecciones de verano.
En octubre, Maduro firmó un acuerdo con la oposición del país y acordó trabajar para lograr una votación presidencial libre y justa. En el acuerdo, dijo que celebraría elecciones antes de finales de este año, y Estados Unidos, a su vez, levantó algunas sanciones como señal de buena voluntad.
Sin embargo, unos días después, Maduro vio cómo una candidata de la oposición, María Corina Machado, ganaba más del 90% de los votos en unas elecciones primarias organizadas por la oposición. Los resultados acentuaron su popularidad y plantearon la posibilidad de que pudiera derrotar a Maduro en unas elecciones generales.
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