MADRID, España.- El combinado deportivo José María Pérez Capote, conocido popularmente como El Pontón, fue durante años un lugar esencial en el municipio Centro Habana, en la capital de Cuba, para quienes querían practicar deporte. Ubicado al pie de dos grandes surtidores de agua, esta instalación ha sido testigo de la formación inicial de reconocidos peloteros cubanos como Lázaro Valle y Enriquito Díaz.
Con dos terrenos de béisbol, una pista de atletismo, sala de judo, canchas de tenis y una piscina olímpica, fue un epicentro de actividad deportiva y recreativa en La Habana, especialmente en las décadas de los 60 y 70, cuando no solo promovía la práctica deportiva de los talentos locales, sino que también ofrecía espacios para la recreación de todos los residentes del área. Niños y jóvenes disputaban encuentros entre barrios, aprendían a nadar, jugar al tenis o practicar judo.
Sin embargo, la actualidad, y desde hace años, de El Pontón es desoladora. Aunque aún recibe a niños y jóvenes, especialmente en las tardes después del horario escolar, las instalaciones se encuentran en un estado deplorable.
Un reportaje realizado por Cubadebate en 2022, decía que habían sido “remozadas algunas de sus instalaciones: los gimnasios, áreas exteriores, el terreno de béisbol, los dugouts y las canchas de frontenis”.
En dicho reportaje la directora del lugar, Idaymis Sánchez Febles, señaló que quedaba pendiente una reparación capital que incluyera las áreas de baloncesto y voleibol. En cuanto a la piscina, que según los vecinos yace vacía desde hace aproximadamente 25 a 30 años, la directiva dijo que se había aprobado un presupuesto para su reparación.
Sin embargo, tanto la piscina como la mayoría de las áreas continúan abandonadas, como lo evidencian fotos tomadas por CubaNet en los últimos días.
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