MADRID, España.- En su más reciente informe, el grupo de asesoría legal Cubalex documentó 1.566 violaciones de derechos humanos en Cuba entre enero y junio de 2025, lo que equivale a casi nueve incidentes diarios.
Los hallazgos muestran una vez más que la represión en la Isla responde a un patrón estructural y predecible de control social, que afecta no solo a opositores y activistas, sino también a ciudadanos sin filiación política.
Según el reporte, 772 personas resultaron afectadas en 105 municipios del país, la mayoría de ellas sin vínculos con organizaciones de la sociedad civil. Entre las víctimas se encuentran estudiantes universitarios, vendedores de alimentos, médicos, ancianos, jóvenes que rechazaron el servicio militar y personas en situación de vulnerabilidad.
Represión a protestas y detenciones arbitrarias
En el primer semestre de 2025 se registraron 159 protestas en todo el país, reprimidas con golpes, amenazas, cortes selectivos de internet y vigilancia contra estudiantes y manifestantes. Las represalias incluyeron expulsiones académicas, citaciones y acoso a quienes mostraron solidaridad con los protestantes.
Asimismo, se documentaron 203 detenciones arbitrarias, dirigidas en más de un tercio de los casos contra las Damas de Blanco, pero también contra opositores, periodistas y ciudadanos comunes.
Uso de la ley como herramienta represiva
El informe denuncia la instrumentalización del sistema judicial como mecanismo de represión. Un ejemplo es el Dictamen 475/2025 del Tribunal Supremo Popular, que amplió la calificación de “sabotaje” —con penas de cadena perpetua o incluso de muerte— a conductas como daños o hurtos menores.
Muertes bajo custodia y condiciones carcelarias
Cubalex registró 24 muertes en prisiones durante el semestre, principalmente por negligencia médica, desnutrición y suicidio. También se reportaron casos por golpizas de autoridades y por huelas de hambre. A estas cifras se suman tres fallecimientos en estaciones policiales y 12 muertes de jóvenes en el servicio militar obligatorio, incluida la explosión en la unidad militar de Melones, en Holguín.
El informe describe las cárceles cubanas como espacios donde persisten la tortura, el hacinamiento, la falta de atención médica y el uso arbitrario de celdas de castigo.
Patrones transversales e impunidad
Cubalex identifica dos prácticas que atraviesan todas las formas de represión: el encubrimiento y la impunidad —ninguna de las 1,566 violaciones ha derivado en sanciones contra los responsables—, y la represión por asociación, que incluye amenazas a familiares, cierre de negocios y hostigamiento económico.
Recomendaciones
La organización llamó a la comunidad internacional a condicionar la cooperación con el régimen cubano al respeto de compromisos en derechos humanos y a garantizar la presencia de observadores independientes en el país.
También instó a fortalecer las redes de solidaridad entre sociedad civil, medios independientes y ciudadanía en el exilio, ante el creciente cerco de censura.
“Los hallazgos del semestre confirman que las violaciones de derechos humanos en Cuba no son hechos aislados, sino el resultado de una estrategia institucionalizada de control social”, concluye el informe.