La Habana, junio y 1955[1]
Sra. Zenobia C. de Jiménez
En Puerto Rico
Mi estimada amiga: Encantado de sus noticias, de la mejoría de Juan Ramón, y del proyecto de Uds., si no realizado, siempre como a punto de poder ocurrir, de la visita de Uds. a La Habana. Sería una alegría para la poesía, y para mí, recuerdos y flechas actuales.
Me alegra mucho lo que me dice de su Diario. ¿Lo que representa para mí haber conocido en aquella oportunidad, a Juan Ramón? Algo como un permanente estado de conciencia, como la aclaración de mi destino, como la marca de mi incesante fervor poético. Creo haber sido siempre fiel a esas señales. Y haber engendrado en mi país, un movimiento poético que se ha hecho historia, imagen operando en la historia. Ese es mi orgullo, y eso es lo que tengo que defender. Lo que sigo defendiendo.
Le envío el No. 38 de Orígenes, acabado de publicar. Y aparte el Orígenes, apócrifo, y el primer número de Ciclón, dirigido por Rodríguez Feo, con el cual he roto toda relación de trato. La patraña que urdió fue un completo fracaso; aliado a gente de aquí y de allá, a intrigantillos desconocedores de lo que había pasado en la cultura cubana en los últimos veinte años, tuvo que convencerse que no bastaban sus millones para imponer criterios, e intervenir en una polémica, que por su carencia de fanatismo y decisión intelectual, no lo rozaba. La marcha del Orígenes que hacemos los que siempre hicimos, prescindiendo ahora de ese señor, es una muestra que la revista tenía un destino en el que él no participaba. Buena lección para los intrigantillos, corachulistas [?], cosmopolitas, que fueron tranquilamente barridos en toda la línea.
Cuando sea posible mándeme escritos de Juan Ramón. Dígale, como siempre, mi cariño. Y que esta ha sido una prueba, si su obra magnífica necesitase acaso [ininteligible] de ningún género, que le dice lo que le acompañamos, lo que le queremos, nosotros los criollos. Pues nosotros, sí lo admiramos. También lo queremos, también lo sentimos como amigo. Querer y recordar, querencia americana. Ahí está su imagen.
Afectos y respetos de J. Lezam
Notas:
[1] Copia fotostática del original en FLLBN. Sobre la ruptura de JLL con Rodríguez Feo, pueden verse la “Advertencia” aparecida en Orígenes, no. 35, p. 66, y el testimonio de Cintio Vitier al respecto en Cercanía de Lezama Lima (Ed. de Carlos Espinosa), La Habana, Letras Cubanas, 1986, p.70-72.