LA HABANA, Cuba.- El preso político José Daniel Ferrer García desde hace más de un año no mantiene contacto frecuente con su familia, y una vez más las autoridades de la prisión de mayor severidad Mar Verde, en Santiago de Cuba, le negaron la visita familiar, así lo confirmó Nelva Ismaray Ortega Tamayo, a través de un audio enviado a CubaNet.
De acuerdo con la esposa de Ferrer García, este 6 de mayo se dirigió junto a su hijo de cuatro años Daniel José y su hijastra Fátima Victoria a la cárcel de Mar Verde, con la intención de ver al prisionero político, sin embargo, “sólo aceptaron la jaba con los alimentos, productos de higiene, aseo y algunos medicamentos”.
“La misma táctica utilizada por más de un año al negar y violar su derecho a recibir visitas tanto familiares como matrimoniales, así como las llamadas telefónicas”, refirió Ortega Tamayo.
La doctora relató también que el pasado 3 de mayo correspondía la visita conyugal, es decir, el llamado “pabellón”, y también les fue negado. Según sus palabras, “un tipo de tortura psicológica no solamente para mi esposo sino también para nosotros sus familiares”.
Asimismo, la esposa del líder de la Unión Patriótica de Cuba denunció que desde hace un año y más de dos meses a Ferrer lo mantienen aislado también de la comunidad penal, en una celda de castigo “bajo condiciones inhumanas, crueles y degradantes, siendo víctima de maltrato y violencia física y psicológica”.
“Todo esto sin atención médica ni estomatológica y con la compañía de los mosquitos y otros vectores de enfermedades, pues no solamente sufren los presos en todo el país por la malnutrición, el hambre, el parasitismo, leptospirosis, tuberculosis, sino también por enfermedades y lesiones dermatológicas por picaduras o contactos con chinches, garrapatas, ratas, cucarachas”, denunció.
Ferrer García, quien se desempeñaba también como presidente del Consejo para la Transición Democrática en Cuba (CTDC), fue detenido el 11 de julio de 2021 tras sumarse en Santiago de Cuba a las protestas antigubernamentales. Desde esa fecha solamente les han dado derecho a 12 visitas familiares y nueve matrimoniales.
Al líder opositor le fue revocada una sanción impuesta en 2020 de cuatro años y 14 días que cumplía sin internamiento.
“Están empeñados en seguir enterrándolo lentamente y matándolo en vida. No solamente al preso, sino a la familia, nos acompaña la incertidumbre, la ansiedad, la angustia, la tortura mental, el coraje, la frustración (…) preguntándonos cómo está, dónde está, qué le habrán hecho, está en huelga de hambre, está golpeado”, expresó Ortega Tamayo.
Asimismo, la mujer hizo un llamado a la solidaridad internacional para que se mantenga el apoyo y la denuncia sobre los abusos que sufre José Daniel Ferrer en la prisión; además, aseguró que seguirán “exigiendo fe de vida, poder verlo y escucharlo, así como su libertad pues es inocente”.
El pasado 6 de mayo la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) adoptó una resolución de seguimiento a las medidas cautelares de José Daniel Ferrer debido a las “condiciones inadecuadas de privación de libertad” en que se encuentra.
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