MIAMI, Estados Unidos. – En la reunión del Consejo de Ministros de Cuba celebrada el pasado fin de semana las autoridades del régimen reconocieron que ni la zafra azucarera ni el turismo marcan como se había planificado.
La complejidad de la situación económica actual fue el telón de fondo de la reunión, que fue presidida por el gobernante cubano, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y dirigida por el primer ministro, Manuel Marrero Cruz, con el habitual espíritu triunfalista que caracteriza al discurso oficial.
En cuanto al turismo, se informó que solo se cumplió el 89% del plan, con un arribo de 268.176 visitantes, cifra que aunque supera los números del año anterior, refleja las dificultades para alcanzar las metas establecidas.
Por su parte, el sector azucarero enfrenta una situación aún más crítica, con bajos rendimientos industriales y cañeros, exacerbados por el déficit de combustible y problemas organizativos.
Julio García Pérez, presidente del Grupo Azucarero Azcuba, señaló que varias empresas azucareras están operando a pérdida, lo que pone en riesgo el cumplimiento del plan de producción de azúcar y su distribución a la canasta familiar, en medio de un escenario de incumplimientos que afectan directamente “el bienestar” de la población.
Aunque “en los últimos días se ha logrado ir recuperando el nivel de producción de azúcar”, lo producido hasta el momento “pone en tensión el cumplimiento del plan y, con ello, la distribución de azúcar de la canasta familiar”, precisó el dirigente.
“Si nosotros no empezamos por identificar las cosas que tenemos mal y les buscamos solución, nos detendremos”, afirmó Marrero Cruz.
La viceministra primera de Economía y Planificación, Mildrey Granadillo de la Torre, reportó sobre la implementación de medidas para corregir “distorsiones económicas”, incluyendo la actualización de precios de combustibles y electricidad. Sin embargo, estas medidas no han tenido el impacto esperado en la contención de precios, que continúan incrementándose.
El secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba, Ulises Guilarte de Nacimiento, destacó el creciente problema del impago a los trabajadores en varios sectores, lo que genera insatisfacción y desafíos adicionales en la gestión empresarial.
En la revisión del comportamiento económico, se reportó un ligero crecimiento en las exportaciones de bienes, pero con fallos en la producción agropecuaria y otros sectores. El ministro de Economía y Planificación, Joaquín Alonso Vázquez ―el sustituto de Alejandro Gil Fernández―, reconoció la necesidad de enfrentar las múltiples dificultades, incluyendo los problemas con el suministro de combustibles.
La reunión también abordó la situación del déficit fiscal, el cual registró una disminución, pero aún con provincias luchando por reducir sus déficits.
Otros temas discutidos incluyeron la gestión de las cuentas por cobrar y pagar, las operaciones de comercio exterior, la implementación de la Ley de Ordenamiento Territorial y Urbano, y el control de la inscripción de inmuebles estatales.
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