MIAMI, Estados Unidos. – El Consejo de Estado del régimen cubano acordó el pasado lunes que las reuniones de rendición de cuentas de los delegados a las asambleas municipales del Poder Popular a sus electores se realicen en todo el país entre el 20 de septiembre y el 15 de noviembre de 2024.
El régimen de la Isla pospuso en octubre de 2023 el primer proceso de rendición de cuentas de los delegados a sus electores en el XVIII mandato de los órganos municipales del Poder Popular. Más adelante, el Consejo de Estado también aprobó no realizar el proceso de rendición de cuentas en el primer trimestre de 2024.
Según medios oficiales, para suplir dichas reuniones, el Parlamento cubano liberó de sus funciones laborales a los delegados cuya labor lo permitiera, en lo que restaba de 2023, “con vistas a incrementar su vínculo y atención a los electores”.
“Los delegados participaron también en tareas de prioridad para el país y para sus respectivos territorios. De ahí que fueran cumplidos satisfactoriamente los objetivos propuestos en la etapa”, indicaron fuentes del Parlamento, citadas por la ACN.
En enero de este año, las plataformas independientes cubanas Observadores de Derechos Electorales (ODE) y Ciudadanos Observadores de Procesos Electorales (COPE) expresaron su preocupación por la posposición del proceso de rendición de cuentas del Poder Popular en Cuba.
Según un comunicado al que tuvo acceso Diario de Cuba, ambas organizaciones calificaron la situación como “altamente preocupante”, dado que se vulneraba la periodicidad de las llamadas “asambleas de rendición de cuentas de los delegados a sus electores”, establecidas por la Constitución cubana y la Ley 132 de Organización y Funcionamiento de las Asambleas Municipales del Poder Popular.
El comunicado también señaló que dichas violaciones se realizan “en función exclusivamente de los tiempos y cálculos políticos del Gobierno, y en contra de los tiempos institucionales”. Las organizaciones recordaron que “ni en momentos (…) del COVID-19 se pospuso el cronograma habitual del único espacio potencial para el ejercicio de la democracia directa en Cuba”.
COPE y ODE también resaltaron la importancia de la rendición de cuentas como supuesto mecanismo democrático: “El único modo de involucrar en la deliberación sobre temas existenciales a quienes se verán afectados por decisiones de instancias alejadas de la vida ordinaria de la sociedad, es mediante el respeto sagrado a los tiempos institucionales de control ciudadano”. Estas asambleas son vistas como cruciales en Cuba, ya que “los órganos locales constituyen la única instancia política de representación en la que los cubanos tienen la posibilidad de (…) ejercitarse como ciudadanos”.
Las consecuencias del aplazamiento fueron consideradas un “atentado a la precaria gobernanza institucional cubana” por COPE y ODE. Ambas organizaciones destacan que “ni la nueva legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular ni los delegados votados en las últimas elecciones han tomado contacto con la ciudadanía dentro de la actual X Legislatura”, lo que se traduce en “más de un año sin escrutinio popular y sin que los ciudadanos hayan podido contrastar desde abajo la capacidad de quienes dicen representar la voluntad del pueblo”.
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