MADRID, España.- El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) anunció este lunes una serie de nuevas medidas destinadas a acelerar las deportaciones de inmigrantes irregulares en la frontera con México. Entre estas medidas se incluyen el aumento en la cantidad de vuelos de repatriación y la expansión de la capacidad de detención y recursos de control.
ICE detalló en un comunicado que durante 2023 promedió 29 vuelos semanales de deportación, y anticipa agregar más vuelos en las próximas semanas para imponer rápidamente consecuencias a quienes crucen ilegalmente la frontera sur.
Además, ICE presentó una moción para reanudar la admisión de personas en el Centro de Procesamiento de Adelanto en California, y anunció el cierre del Centro Residencial Familiar del Sur de Texas, en Dilley. Este cierre permitirá a la agencia reasignar fondos para aumentar la capacidad de camas de detención en aproximadamente 1.600 en todo el sistema, proporcionando una mejor respuesta a las necesidades operativas.
El subdirector de ICE, Patrick J. Lechleitner, afirmó que la agencia sigue enfocada en satisfacer las necesidades operativas cambiantes de la misión de control de inmigración de manera fiscalmente responsable. “Podemos seguir aumentando los vuelos de deportación y la capacidad de espacio en camas de detención para apoyar el panorama dinámico de la inmigración”, señaló al respecto.
Estas medidas llegan tras la firma de una orden ejecutiva por parte del presidente Joe Biden el pasado martes, la cual implementa una serie de iniciativas para impedir que la mayoría de personas que crucen la frontera de manera irregular puedan solicitar asilo. Según ICE, estos esfuerzos respaldan la Proclama Presidencial del 4 de junio de 2024, que cierra las solicitudes de asilo en la frontera cuando los funcionarios estadounidenses consideran que la frontera sur está abrumada, agilizando el proceso de deportación de aquellos que no tienen una base legal para permanecer en el país.
Entre las medidas de la pasada semana se incluye una proclamación bajo la Ley de Inmigración y Nacionalidad que suspende la entrada de no ciudadanos que crucen ilegalmente la frontera sur de Estados Unidos. “Estas acciones estarán en vigor cuando la frontera sur se vea desbordada”, señaló Biden.
En consonancia con la medida presidencial, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) publicó una regla para garantizar que los migrantes que representan un riesgo para la seguridad pública o nacional sean removidos lo más rápidamente posible del territorio nacional. “Esta regla mejorará la seguridad y proporcionará consecuencias más rápidas para aquellos que no tienen una base legal para permanecer en Estados Unidos”, explicó un portavoz del DHS.
Entre el inicio del año fiscal 2024, en octubre de 2023, y abril de 2024, un total de 1.981.177 migrantes cruzaron la frontera de Estados Unidos de forma irregular. Según datos del servicio de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), de ese total más de 144.000 eran cubanos. Esta cifra es mucho mayor que los 115.000 encuentros con la guardia fronteriza que tuvieron lugar en el mismo periodo de 2022.
Solamente en abril pasado, casi 18.000 cubanos cruzaron la frontera de Estados Unidos; exactamente17.870. Mientras que en marzo lo hicieron 19.571 y en febrero 20.815.
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