MADRID, España.- El Producto Interno Bruto (PIB) de Cuba se contrajo un 1,9 % en 2023, según anunció este lunes 16 de julio el Ministerio de Economía y Planificación (MEP) de Cuba, encabezado por Joaquín Alonso Vázquez. Este dato se encuentra dentro del margen de una caída del 1 al 2 % previsto por el régimen a finales de 2023. Este declive prolonga una tendencia negativa, dejando la economía cubana aún por debajo de los niveles previos a la pandemia de la COVID-19.
En 2020, el PIB de Cuba sufrió una caída drástica del 10,9 %, seguida por un leve crecimiento del 1,3 % en 2021 y del 1,8 % en 2022.
Según el ministro Alonso Vázquez, citado por la prensa oficialista, las principales causas de este retroceso incluyen “insuficientes ingresos en divisas, créditos externos y baja recuperación de la producción nacional. A la vez, hay limitaciones con el combustible y la energía, elevada y persistente inflación y alto endeudamiento externo”.
Sobre la inflación agregó que se mantiene una tendencia a la desaceleración desde 2023, “pero con resistencia a su reducción en el entorno de 30 por ciento”.
“Todo lo que hemos venido haciendo, sobre todo en los últimos meses, tiene que apuntar a una recuperación en el resto del año”, dijo Vázquez. En este sentido, consideró que el comportamiento favorable de los principales rubros exportables, como el tabaco, la angula y otros productos pesqueros, así como los biofarmacéuticos, será crucial. No obstante, señaló que las producciones de níquel, azúcar, miel y rones, entre otros, no alcanzaron los ingresos previstos, lo que requiere la creación de un entorno más favorable en el segundo semestre, con la implementación de esquemas de autofinanciamiento en divisas para reimpulsar estas actividades.
Durante su intervención en la Comisión de Asuntos Económicos de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP), Vázquez destacó que el sector del turismo y los hoteles fue el que más aportó al PIB en 2023, con un 13 %. Sin embargo, alertó que los datos de 2024 no han sido alentadores. En el primer semestre del año, Cuba ha recibido solo el 88 % de las divisas previstas, lo que se traduce en 222 millones de dólares menos de lo anticipado.
Al referirse al turismo, Vázquez mencionó que creció un 1.8 % respecto a 2023, pero los 1.8 millones de visitantes representan solo el 85 % del plan y el 51.6 % de lo alcanzado en 2019. Los principales mercados emisores son Canadá, Rusia, los cubanos residentes en el exterior y Alemania, según el ministro.
Sin embargo, el economista Pedro Monreal cuestionó en la red social X los datos presentados por el régimen. Monreal señaló que los datos de turismo exhibidos en el informe son erróneos, ya que las cifras no coinciden con los registros conocidos. Además, criticó que el relato oficial sobre la economía cubana no es autocrítico y reemplaza el término “crisis” por “complejo escenario”, sin admitir las causas reales de la crisis, como el alto déficit y las emisiones monetarias excesivas. Como en ocasiones anteriores, Monreal insistió en que la economía cubana necesita abandonar el esquema de planificación centralizada.
Por su parte, el especialista Miguel Alejandro Hayes expresó a Martí Noticias que “una contracción del PIB es lo menos que se puede esperar en una economía que sigue dirigiéndose de manera autoritaria y sin tener en cuenta lo que dice la teoría y la evidencia empírica respecto a las prácticas económicas”.
Hayes criticó que este dato no refleja la magnitud de la crisis económica estructural, sistémica y crónica que atraviesa Cuba. Además, señaló que el PIB como medida no siempre representa el impacto real en el nivel de vida de los ciudadanos, y sugirió que indicadores como la inflación y la pérdida del poder adquisitivo serían más reveladores.
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