LA HABANA, Cuba. – El reportero independiente y activista por los derechos humanos Yoel Acosta Gámez exigió al régimen cubano atención médica y medicamentos para su hijo de casi seis años que, además de padecer lesiones en la piel desde hace cuatro meses, necesita ser operado debido a una hidrocele diagnosticada al nacer.
Acosta Gámez, colaborador de la agencia audiovisual independiente Palenque Visión y residente en la localidad baracoesa de Bohórquez, explicó a CubaNet que su hijo, Yoeldris Acosta Lores, nació con un tipo de inflamación del escroto llamada hidrocele, además de una hernia asociada.
“Esta enfermedad tenía que ser valorada por los médicos desde que el niño tenía dos años. Él debía ser operado con urgencia para evitarle problemas de salud”, explica.
Según el reportero independiente, aunque seis años atrás los médicos del Hospital Octavio de la Concepción y la Pedraja confirmaron que su hijo debía someterse a cirugía y pese a sus numerosas visitas a la institución, la familia sigue esperando por que los especialistas procedan.
“Hemos hecho todas las gestiones para operarlo, incluso una vez le hicimos todos los análisis preoperatorios pero el cirujano desapareció. Nos dijeron que estaba cumpliendo misión y que el hospital de Baracoa no contaba con más cirujanos para poder hacer ese procedimiento”, lamenta Acosta Gámez.
Desde hace más de tres meses, el pequeño Yoeldris también padece de un tipo de herpes alrededor de sus genitales.
“Por dichas llagas estuvo ingresado dos días y le dieron de alta porque no había medicamentos. También me dijeron que debido a la pandemia de COVID-19 era muy riesgoso tenerlo en el hospital”, asegura.
En ese sentido, el activista denuncia que luego de dos días tratando al niño con antibióticos sin resolver su situación, los médicos lo mandaron para la casa con varias recetas médicas, pese a que los medicamentos prescritos para tratar el herpes no están disponibles.
Acosta Gámez ha sido detenido en varias ocasiones. Solo en marzo fue arrestado cinco veces, mientras que en mayo la policía política lo mantuvo secuestrado por ocho días.
En esa ocasión, los agentes de la Seguridad del Estado lo amenazaron con desatender a su familia y no brindarle atención médica a su hijo, si no cambiaba su postura en contra de la dictadura.
“Hago un reclamo internacional para que conozcan la situación por la que está atravesando mi familia. Necesitamos medicamentos, antibióticos como la ciprofloxacina y la amoxicilina y el aciclovir para el herpes”, dijo.
Además de exigirle al régimen atención médica y solicitar ayuda para los medicamentos que necesita su hijo y que no puede adquirir debido a la grave escasez de medicinas en la Isla, Acosta Gámez responsabiliza al Gobierno por el estado de salud de su pequeño.
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