MADRID, España.- Este 20 de mayo se cumplen 52 años de la muerte de Martín Dihigo, el primer pelotero cubano incluido en el Salón de la Fama de las Ligas Negras.
Nacido en el ingenio Jesús María en la provincia de Matanzas, comenzó a practicar béisbol en campeonatos juveniles y ya a los 17años jugaba en el béisbol profesional de Cuba, donde debutó como jugador de cuadro en la temporada 1922-1923.
En las Ligas Negras debutó en 1923 como primera base de los Cuban Stars. En su primera temporada fue líder jonronero. En 1926 y 1927 bateó para promedios de 421 y 370 respectivamente. En estas Ligas se mantuvo desde 1923 a 1936, y brevemente en 1945.
Apodado “El Inmortal” o “El Maestro”, en su carrera en la Isla destaca el campeonato 1935/1936, donde fue líder de bateo con 358 de average. En Cuba, donde jugaba durante los inviernos, lanzó 120 juegos completos, de los que ganó 106.
Martín Dihigo también dejó su impronta en la Liga Mexicana, en la que protagonizó el primer no hit no run en la historia de esta liga, récord logrado con su equipo, Águilas de Veracruz, en 1937.
El antillano es considerado como uno de los peloteros más completos de la historia de este deporte, ya que podía jugar con éxito las nueve posiciones del béisbol. Está consagrado en los salones de la fama de Cuba, los Estados Unidos, México, República Dominicana y Venezuela.
El videojuego MLB The Show 23, estrenado en marzo pasado, incluyó entre sus personajes a Dihigo. En la modalidad “Storylines”, el videojuego rinde homenaje a las Ligas Negras y a algunos de sus más grandes jugadores. En este sentido, cuenta la historia de cada uno de estos jugadores a través de una introducción en video a modo de documental, seguido del juego, que refleja momentos relevantes de la carrera de cada jugador.
