MÉRIDA, México -. PEN Internacional, PEN Cuba en el Exilio y Artists at Risk Connection (ARC) condenaron la reciente detención arbitraria de las académicas cubanas Alina Bárbara López Hernández y Jenny Pantoja.
Este hecho ejemplifica el continuo acoso y persecución de escritores, periodistas y artistas en Cuba, se lee en una declaración conjunta.
“No existe justificación alguna para que el gobierno cubano detenga arbitrariamente a escritores y activistas con el fin de silenciar su trabajo y su expresión pacífica”, dijo Romana Cacchioli, directora ejecutiva de PEN Internacional.
“La comunidad internacional de PEN se opone firmemente a estas acciones injustas e insta a las autoridades cubanas a que cesen el acoso a quienes valientemente utilizan su voz y su arte para hablar en nombre de su pueblo”, exigió
Por su parte, el colaborador de Cubanet Daniel Pedreira, presidente del Centro PEN de Escritores Cubanos en el Exilio, precisó que “como muchos cubanos, Alina Bárbara López Hernández y Jenny Pantoja han sido víctimas de la represión del gobierno cubano contra cualquiera que se atreva a desafiar su autoridad, particularmente intelectuales y académicos”.
Asimismo, Julie Trébault, directora de Artists at Risk Connection, considera que el acoso sobre las académicas “es indicativo del uso continuado que el gobierno cubano hace de sus fuerzas de inteligencia y policiales para perseguir a los artistas y reprimir la libertad de expresión”.
“Nos solidarizamos con estos escritores y con todos los creativos de la isla que trabajan incansablemente para crear un entorno que incluya y fomente la libertad artística y la protesta pacífica”, agregó.
Detención violenta
El pasado 18 de junio, la profesora, ensayista e historiadora cubana Alina Bárbara López Hernández y su colega, Jenny Pantoja Torres, fueron detenidas oficiales de la Seguridad del Estado y la Policía cuando salían de Matanzas rumbo a La Habana para desarrollar en una protesta pacífica.
Ambas fueron liberadas horas más tarde, pero esa noche terminaron en el hospital debido a los golpes que recibieron.
López Hernández recibió un fuerte impacto en la cabeza luego de que una oficial del MININT la tumbara en el piso.
También fue arrastrada hasta la patrulla, agarrada de manos y pies, e incluso halada por los pelos para meterla en el vehículo. De camino a la estación policial, la oficial le apretó tanto las esposas que, según relató luego la intelectual, el dolor llegó a ser tan fuerte que dejó de sentirlo.
“Lo que ocurrió conmigo y con Jenny aquel día, ha ocurrido en otros muchos casos pero, ciertamente, es una escalada. Cualquier cambio tiene que traer consigo el compromiso de evitar que a las personas en Cuba se les reprima de manera violenta para que no ejerzan sus ideas”, ha dicho la escritora en una reciente entrevista concedida a Cubanet.
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