MIAMI, Estados Unidos. – El gobernante cubano, Miguel Díaz-Canel, reinauguró este jueves la Casa del Habano de Dubái, la más grande de Oriente Medio, según un reporte de la cuenta de la Presidencia de Cuba en la red social X, antes Twitter.
Díaz-Canel viajó a Emiratos Árabes Unidos (EAU) junto a su esposa, Lis Cuesta Peraza, y el hijo de esta, para participar en un encuentro con empresarios emiratíes vinculados a la producción de alimentos, el turismo, las fuentes renovables de energía y el sector farmacéutico, de acuerdo con el sitio oficial Cubadebate.
“Provechoso intercambio sostuve con empresarios emiratíes sobre las diversas oportunidades de negocios en Cuba, en aras de desarrollar proyectos conjuntos en sectores de interés común y dinamizar los nexos económicos, comerciales, financieros y de cooperación entre ambos países”, escribió el gobernante en X.
“Se abren muchas posibilidades, para impulsar el desarrollo económico mutuamente beneficioso. Les aseguro todo el apoyo para que inviertan en nuestro país, en cualquier modalidad de negocio”, también dijo Díaz-Canel en un intento de atraer inversores emiratíes.
Por su parte, Mohammed Mohebi, presidente de Baquer Mohebi Enterprises y distribuidor de Habanos en Emiratos Árabes Unidos, aseguró que su país es el mercado más grande para los puros cubanos en la región.
El empresario también agradeció la ayuda médica enviada por el régimen cubano a EAU durante la pandemia de COVID-19.
Un historial de complicidad
Pese a sus diferencias culturales y religiosas, Emiratos Árabes Unidos y el régimen cubano comparten un historial de violaciones a los derechos humanos. Además, los gobiernos de ambos países se apoyan mutuamente en foros internacionales, para minimizar las condenas del mundo democrático.
En octubre de este año trascendió que La Habana había reordenado el pago de la deuda contraída con EAU, la cual asciende a unos 55 millones de dólares.
En ese momento, representantes del régimen firmaron un memorando de entendimiento con las autoridades de EAU para el reordenamiento del pago de los financiamientos entregados por el Fondo Abu Dhabi para el Desarrollo (ADFD) a la Isla desde 2015.
Una nota de la Agencia Cubana de Noticias reportó que el acuerdo se produjo durante una visita de trabajo a esa nación de Ricardo Cabrisas, viceprimer ministro y titular del Comercio Exterior e Inversión Extranjera de Cuba.
Según refirió Carlos Pereira, director general de Asuntos Bilaterales del Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX) de Cuba, en la reunión se “reafirmó” la “voluntad avanzar en fortalecimiento de relaciones de los dos países”.
Cabrisas enfatizó que era el momento propicio para “imprimir nuevo impulso a relaciones económicas, comerciales, financieras y de cooperación”, así como del “turismo, la agricultura y las energías renovables”.
Además, agradeció el “apoyo” de EAU y del Fondo Saudita para el Desarrollo por la financiación de proyectos “de gran impacto social para la población cubana”.
Emiratos Árabes Unidos, un país violador de los derechos humanos, abrió su embajada en La Habana en 2015, cuando también firmó un acuerdo de servicios aéreos con la Isla.
Ha sido frecuentemente señalado por la imposición de leyes que restringen significativamente la libertad de expresión, de asociación y de reunión. De igual forma han condenado en ese territorio la tortura y malos tratos contra defensores de los derechos humanos y personas acusadas de delitos contra la seguridad del Estado o por discriminación de personas lesbianas, gais, bisexuales, transgénero e intersexuales (LGBTI).
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