MÉRIDA, México -. Las labores de reparación en el Túnel de La Habana comenzaron este sábado como estaba planificado.
El ministro de Transporte Eduardo Rodríguez Dávila anunció en Facebook el inicio de los trabajos que se iniciaron con el cierre de la senda Habana-Cabañas a las 12 de la noche del sábado.
En esa senda, se sustituirá la primera rejilla, de suma importancia para la evacuación de las aguas, precisó la información.
La rejilla se fue moviendo de su lugar original con el paso de los años por lo que se colocó como sustituto una plancha de metal.
Para la sustitución de la rejilla, se deberá demoler una parte del pavimento.
“Después que se demuela el hormigón, que sustenta hoy la rejilla, se pasa a la recogida de escombros, se retira el material viejo, y se procede a enconfrar y limpiar para verter nuevamente el hormigón, que dará solución el problema del deterioro de la zona de la rejilla”, se lee en el post del ministro.
Los trabajos de demolición, encofrado y hormigonado de la rejilla están previstos para concluir en tres días, tras los que se esperará siete días para la primera fase de fraguado del hormigón, hasta la reapertura del túnel.
Luego de la apertura del túnel, se colocará nuevamente la plancha de protección sobre la rejilla para su protección hasta el 5 de mayo, cuando se alcanzará el fraguado definitivo de la entrada túnel.
Asimismo, se llevarán a cabo otras actividades constructivas y de mantenimiento como el bacheo con hormigón asfáltico caliente para tapar los huecos visibles en los 700 metros de la senda cerrada o el descorchado de los techos y la limpieza de sus aceros.
Además de entidades estatales como la Empresa de Viales de La Habana, en la obra participan la mipymes Doctamel, Cobas Construcciones y EMCONAT.
Las dos primeras se encargarán de la reparación de los aletones a la salida del túnel, mientras que la tercera “apoyará en la limpieza de las cinco baterías de rejillas, la reparación de los semáforos la limpieza de las paredes y el acondicionamiento del alumbrado del túnel”.
La clausura del túnel, cuarta en menos, de un año concluirá el día 17, lo cual supone un cierre de 12 días.
Durante el cierre, solo tienen acceso al túnel los vehículos del régimen especial de circulación, dígase ambulancia, bomberos, PNR, de igual forma los vehículos de transportación de pasajeros relacionados con ómnibus de transportación pública y de empresas, servicio de taxis y ruteros y los porteadores privados debidamente identificados con la pegatina de servicio regular.
Mientras, “el resto de los usuarios podrá utilizar como vías alternativas en su desplazamiento, desde y hacia el este, la Vía Blanca, Ciudad Deportiva, Avenida 26, Avenida del Puerto, Anillo del Puerto”.
Un día antes de anunciar el cierre, el Gobierno de La Habana había salido a aclarar que el goteo que presenta el Túnel no representaba un peligro para la estructura y la circulación de vehículos.
En un post de Facebook, las autoridades aseguraron que “a raíz de un goteo surgido en el interior del túnel, se realizaron estudios por parte de la Empresa Nacional de Investigaciones Aplicadas (ENIA) del MICONS”.
De esta manera, los estudios concluyeron que “el ciclo de goteo apreciado es similar al presentado en otros momentos en años anteriores y que, aunque será intervenido para su impermeabilización, algo en lo que se trabaja pues requiere condiciones, materiales y asesoría especializada, no representa por el momento peligro para la estructura y circulación actual del túnel”, justificaron.
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