LA HABANA, Cuba.- Desde el centro penitenciario de máximo rigor Combinado del Este, el prisionero de nacionalidad india Dalvinder Singh Jagpal denuncia la excesiva condena, sin pruebas, recibida en Cuba en la primera década del presente siglo.
A través de una conversación telefónica, Singh Jagpal dio a conocer que fue encarcelado en el mes de noviembre de 2002 por el presunto delito de “corrupción de menores”, y a los diez meses de cautiverio, mientras se hallaba en espera de juicio en el centro penitenciario La Condesa, le agregaron el delito de tráfico de drogas internacional. Sin embargo, el ciudadano indio niega haber cometido esos delitos.
Singh Jagpal denunció haber sido sentenciado a diez años de cárcel por “convicción”, método empleado por las autoridades cubanas para condenar a los acusados en ausencia de pruebas que demuestren su culpabilidad. También destacó que luego le añadieron otra condena de 25 años de cárcel sin testigos, sin presentar pruebas a la Embajada de la India, ni informar a la Interpol.
De igual modo hizo énfasis en que las autoridades cubanas demoraron dos años y medio en celebrarle el juicio, e igual período en decidir su condena. Finalmente fue sentenciado a treinta años de privación de libertad, pero contados a partir del año 2007, sin tener en cuenta que permanecía encarcelado desde 2002.
Singh Jagpal recalcó que durante los primeros cinco años de cautiverio las autoridades no le entregaron copia de su sentencia, y tampoco accedieron a la solicitud de revisión de su causa. A partir de entonces, narra el ciudadano indio, comenzó a hacer publicaciones en internet, incluso logró filmar un video revelando las infrahumanas condiciones de las prisiones cubanas, motivo por el cual fue castigado con dos años bajo régimen de máxima severidad, además de someterlo a torturas durante más de ocho años.
Singh Jagpal declaró igualmente que en el año 2014 las autoridades cubanas le ofrecieron transferirlo a una prisión de su país para que terminara de cumplir la sentencia, a lo cual él se negó pues insiste en que es inocente. Denunció también que en el mes de diciembre de 2021 le correspondía la libertad condicional, pero esta le fue negada por un año sin orden judicial, y en diciembre de 2022 se la denegaron nuevamente por igual período.
El prisionero insistió en que el régimen de la Isla ha violado todos sus derechos penitenciarios y jurídicos, respaldado por la indolencia de la diplomacia india.
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