MIAMI, Estados Unidos. — En medio de la persistente crisis migratoria que afecta a Cuba desde finales de 2021, un nuevo informe del Instituto Nacional de Migración de Honduras revela que 85.969 migrantes cubanos cruzaron por ese país centroamericano en el año 2023.
La cifra coloca a los cubanos como la segunda nacionalidad con mayor presencia de migrantes irregulares que buscan llegar a la frontera sur de Estados Unidos.
Según el informe, 50.000 de estos migrantes tenían edades comprendidas entre 21 y 40 años, mientras que más de 16.000 eran niños.
Venezuela encabezó la lista con la mayor cantidad de migrantes detectados en territorio hondureño, alcanzando la cifra de 228.889 personas, entre un total de 545.000 migrantes de diversas nacionalidades.
No obstante, las estadísticas podrían subestimar la magnitud del éxodo cubano. A pesar de que las autoridades hondureñas registraron 85.969 cubanos en tránsito irregular, se estima que la cifra real podría triplicarse. Esto se debe a que el año pasado cerca de 200.000 cubanos solicitaron refugio en la frontera entre Estados Unidos y México, tras una travesía que atraviesa Centroamérica, comenzando en Nicaragua.
La travesía de los migrantes cubanos inicia en Nicaragua, desde donde se desplazan rápidamente hacia Honduras, cruzando el país sin reportarse ante las autoridades migratorias. Esta falta de registro explicaría la discrepancia en las cifras oficiales.
Entre el 1 de octubre de 2022 y el 30 de septiembre de 2023, más de 200.000 cubanos fueron detenidos en los puntos fronterizos estadounidenses. Además, en lo que va del presente año fiscal, la cifra ya supera los 40.000. La estadística da cuenta de la magnitud y complejidad de la crisis migratoria que enfrenta la región.
Los últimos incidentes vinculados con migrantes cubanos en Honduras datan de octubre de 2023. El día 15 de ese mes, un autobús que transportaba alrededor de 60 personas, entre ellas varios nacionales de la Isla caribeña, cayó en el río Higuito, entre Santa Rosa de Copán y Ocotepeque. En el accidente se reportaron cuatro muertos, ninguno de ellos era cubano.
Días antes, una migrante cubana de 52 años murió dentro de un ómnibus que la trasladaba por el interior de Honduras en medio de su travesía para llegar a la frontera sur de Estados Unidos. La mujer sufrió un ataque al corazón cuando atravesaba el municipio de Quimistán, Santa Bárbara, en el departamento de Ocotepeque.
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