MADRID, España.- Los familiares del preso político cubano José Daniel Ferrer expresaron preocupación por la vida del opositor. Hace más de un mes no han tenido noticias suyas, pues el régimen le prohíbe las llamadas y las visitas en la prisión de Mar Verde.
“Hace unos minutos recibí la preocupante noticia de que no hubo visita alguna con José Daniel Ferrer”, dijo este miércoles su hermana, Ana Belkis Ferrer.
La opositora explicó desde redes sociales que el líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) tenía programada una visita, anunciada por las propias autoridades, para este 5 de abril. Sin embargo, cuando Nelva Ismarays Ortega, la esposa de José Daniel Ferrer, llegó al penal en compañía de sus hijos, no le permitieron verlo.
“Solo aceptaron la jaba de alimentos y productos de higiene e impidieron el encuentro familiar”, explicó Ana Belkis Ferrer, quien había compartido fotos de la familiar rumbo al centro penitenciario.
“Responsabilizamos a Raúl Castro, Díaz-Canel y sus verdugos encargados de reprimir y aniquilar a mi valiente y abnegado hermano por lo que esté pasando y exigimos no solo que puedan escucharlo, verlo y que cesen las torturas en su contra, sino también su inmediata e incondicional liberación y la de todos los presos políticos”, declaró.
José Daniel Ferrer fue detenido el 11 de julio de 2021 (11J) cuando se disponía a sumarse a las manifestaciones populares. Lo trasladaron a un calabozo en el centro de tortura de Versalles, y a inicios de agosto lo enviaron de ahí a la prisión de Mar Verde, donde se encuentra desde entonces y sin fecha de juicio.
Durante todo este tiempo las autoridades carcelarias lo han tenido en una celda en condiciones inhumanas, crueles y degradantes, aislado de la comunidad penal y sometido a mítines de repudio, a pesar de su delicado estado de salud.
