MADRID, España.- Amnistía Internacional (AI), organización que analiza la situación de los derechos humanos en el mundo, exigió al régimen de la Isla la liberación inmediata e incondicional del preso político cubano José Daniel Ferrer, quien lleva casi tres meses incomunicado en la prisión de Mar Verde, en Santiago de Cuba.
“Por 82 días, el líder político José Daniel Ferrer ha estado incomunicado en prisión. José Daniel Ferrer es uno de los cientos de presos de conciencia de Díaz-Canel en Cuba. ¡Exigimos su liberación inmediata e incondicional!”, dijo este miércoles desde Twitter la directora para las Américas de Amnistía Internacional, Erika Guevara Rosas.
En un video que acompaña a la publicación, Amnistía Internacional destacó que en esos 82 días la esposa del opositor, Nelva Ismaray Ortega Tamayo, no ha recibido señales de vida de su pareja, pues las autoridades castristas le han prohibido visitarlo y comunicarse con él.
🇨🇺 Por 82 días el líder político @jdanielferrer ha estado incomunicado en prisión.
José Daniel Ferrer es uno de los cientos de presos de conciencia de @DiazCanelB en #Cuba
¡Exigimos su liberación inmediata e incondicional!#CubaSinRepresión pic.twitter.com/hKK7gguH7p
— Erika Guevara Rosas (@ErikaGuevaraR) June 7, 2023
El pasado 18 de mayo Amnistía Internacional remitió una carta abierta al mandatario de Cuba Miguel Díaz-Canel exigiendo la liberación inmediata de José Daniel Ferrer y hasta la fecha no ha recibió respuesta.
Este 6 de junio, al cumplirse tres meses de la última llamada telefónica que le permitieran a José Daniel Ferrer y casi el mismo tiempo de la última visita de sus familiares a prisión, Ana Belkis Ferrer, hermana del también líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), exigió al régimen fe de vida.
Ana Belkis Ferrer también responsabilizó a Raúl Castro y a Díaz-Canel de lo que pueda ocurrirle a su hermano en el centro penitenciario.
José Daniel Ferrer, promotor de Cuba Decide y presidente del Partido del Pueblo, fue detenido el 11 de julio de 2021 (11J) cuando se disponía a sumarse a las manifestaciones populares. Lo trasladaron a un calabozo en el centro de tortura de Versalles, y a inicios de agosto lo enviaron de ahí a la prisión de Mar Verde, donde se encuentra desde entonces y sin fecha de juicio.
