CDMX, Ciudad de México. – Tras la remoción esta semana de las estatuas de Fidel Castro y Ernesto Che Guevara del Jardín Tabacalera, en Ciudad de México, el embajador del régimen cubano en ese país, Marcos Rodríguez Costa, reaccionó en redes sociales sin mencionar directamente el hecho, pero difundiendo un mensaje que ha sido interpretado como una respuesta indirecta a la polémica.
“La verdadera Revolución no es de piedra ni bronce: es la conciencia transformada, la voluntad colectiva de luchar y construir un mundo más justo”, escribió Rodríguez Costa en su cuenta de X (antes Twitter).
En la misma publicación, el diplomático citó una frase del propio Fidel Castro, tomada de su concepto de Revolución: “…no existe fuerza en el mundo capaz de aplastar la fuerza de la verdad y las ideas”.
El mensaje fue acompañado de etiquetas a varias figuras afines al oficialismo cubano y mexicano: Claudia Sheinbaum Pardo, presidenta de México; Fidel Antonio Castro Smirnov, nieto del fallecido dictador cubano; Eugenio Martínez Enríquez, director general de América Latina y el Caribe del Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX) de Cuba; así como a medios simpatizantes del régimen como TeleSur y La Jornada.
De hecho, este jueves La Jornada se hizo eco de un comunicado del Partido Popular Socialista de México, compartido en redes sociales por el Movimiento Mexicano de Solidaridad con Cuba, y de la reacción de la propia Sheinbaum Pardo.
“Manifestamos nuestro rechazo al retiro unilateral y cobarde de las estatuas de Fidel Castro y el Che Guevara”, afirmó el Partido Popular Socialista de México. El Movimiento Mexicano de Solidaridad con Cuba, el grupo que compartió el comunicado, ha sido señalado por sus reacciones violentas contra exiliados cubanos en México.
Por su parte, la presidenta mexicana, emplazada sobre el tema en su habitual conferencia mañanera correspondiente a este jueves, dijo que, si la alcaldesa de Cuauhtémoc no quería las estatuas, estas debían reubicarse en otro lugar de la ciudad. “¿Por qué no la entrega y la ponemos en otro lado?”, preguntó Sheinbaum, que calificó de “mal” la remoción de la obra escultórica.
“Si su intención es que [la obra] ya no esté ahí, pues hablamos con la jefa de Gobierno [de la Ciudad de México, Clara Brugada] porque es un momento histórico más allá de estar de acuerdo o no con uno u otro personaje que tiene que ver con México”, agregó la gobernante.
Aunque la Embajada de Cuba en México y el director general de América Latina y el Caribe del Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX) retuitearon la publicación de Rodríguez Costa, hasta el momento ni la Cancillería cubana ni otras instancias oficiales han emitido declaraciones explícitas sobre la decisión de la Alcaldía Cuauhtémoc.
Fuera de aquí Fidel, fuera el Che
El pronunciamiento del embajador ocurrió después de que la alcaldesa de Cuauhtémoc, Alessandra Rojo de la Vega, confirmara el retiro del monumento El Encuentro, que representaba la reunión en México entre Fidel Castro y el Che Guevara en 1955. Las esculturas, colocadas desde 2017, fueron eliminadas por decisión de la Alcaldía tras reclamos vecinales y la detección de irregularidades legales en su instalación.
“Ni el Che ni Fidel pidieron autorización para instalarse en Cuba… y tampoco en la [colonia] Tabacalera”, declaró Rojo de la Vega en sus redes sociales, en una alusión crítica al legado autoritario de ambos líderes comunistas.
La funcionaria también argumentó que “nunca hubo un procedimiento completo para colocarlas, no existe la cédula obligatoria que se necesita ante el Comité [de Monumentos y Obras Artísticas en Espacios Públicos] (…). En los archivos de la Alcaldía no existe un solo papel que autorice su instalación”.
https://x.com/AlessandraRdlv/status/1945681387589365919La alcaldesa subrayó que las figuras estaban bajo resguardo “irregular” de un trabajador de la Alcaldía, sin respaldo legal. “Aquí en Cuauhtémoc se acabó eso de hacer lo que quiero, poner lo que quiero y pasar por encima de la ley”, recalcó.
El monumento, diseñado por el escultor Óscar Pozanelli, fue inaugurado el 2 de diciembre de 2017 por el entonces jefe delegacional Ricardo Monreal (morenista). Desde su instalación, generó controversia, incluyendo actos de vandalismo y protestas ciudadanas que denunciaban el homenaje a figuras asociadas con la represión en Cuba.
Durante una manifestación convocada en octubre de 2021 por la organización Misión Rescate México CDMX, los activistas sostuvieron pancartas con mensajes como “México no puede rendir tributo a asesinos” y “En Cuba no existe la libertad de expresión ni de manifestación”.