MADRID, España.- Este 18 de noviembre se cumplen tres años del fallecimiento de Broselianda Hernández, una de las más grandes actrices cubanas.
Su nombre aparece como parte del elenco de al menos 18 películas cubanas o coproducidas. Ella tuvo el lujo de trabajar con varios de los mejores cineastas de la isla: Fernando Pérez, Humberto Solás, Enrique Pineda Barnet, entre otros. Además, estuvo bajo la dirección del español, Manuel Gutiérrez Aragón en Una Rosa de Francia.
Su trayectoria en el teatro también será siempre recordada, sobre todo sus años en el Grupo El Público, al que se unió en los 90 y de inmediato fue parte esencial de la compañía, que es una de las más reconocidas de Cuba.
Aunque el paso de Broselianda por la televisión no fue tan copioso como en la pantalla grande y las tablas, allí donde intervino dejó su huella, por su indiscutible talento y carisma. Entre estos casos se encuentran las telenovelas cubanas Cuando el agua regresa a la tierra y Las honradas, ambas protagonizadas por Broselianda.
Cuando el agua regresa a la tierra
En tres ocasiones la Unión de Escritores y Artistas de Cuba confirió el premio de actuación femenina a Hernández. La primera vez lo recibió por su interpretación en Cuando el agua regresa a la tierra.
En esta telenovela, estrenada en 1993 bajo la dirección de Mirta González Perera, la actriz encarnaba a una jovencita espontánea y libre que, a diferencia del resto de la familia, apoya a su abuelo Ventura (Manuel Porto) en su decisión de no abandonar las tierras donde viven, en la Ciénaga de Zapata.
A través de la relación entre ambos se van desarrollando las subtramas de la novela. En Cuando el agua regresa a la tierra Broselianda compartió elenco también con Fernando Hechavarría, Héctor Echemendía, Salvador Wood y Anabel Leal, entre otros.
Las honradas
La telenovela Las Honradas, una adaptación de la televisión cubana a la obra homónima de Miguel de Carrión, se estrenó en 1990 y estuvo dirigida por Yaki Ortega.
En este audiovisual Broselianda encarna a Victoria, la protagonista, una mujer atada legalmente a Joaquín (Jorge Martínez), de quien no se siente atraída sexualmente. Sin embargo, se enamora de Fernando (César Évora), un hombre apuesto e engreído que se convierte en su amante y termina rechazándola. Victoria nunca dejó a su esposo, quien tampoco se entera de su infidelidad.
En una entrevista que en 2010 Broselianda dio a Amaury Pérez confesó que, a la hora de enfrentar los personajes, lo hacía con muchos miedos y mucha exigencia. “Para mí actuar es un gran placer, pero también es una gran agonía. Siempre tengo esa doble mirada, esa mirada crítica todo el tiempo, lo mismo hacia mí, que hacia un guion”. Hasta para las escenas más pequeñas, Hernández confesó que estudiaba mucho. Era parte de su infinita exigencia hacia ella misma.
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