MIAMI, Estados Unidos. – La producción de masa para croquetas con hueso blanco (canilla) fue una de las “iniciativas” presentadas durante el III Taller Provincial “Reciclando para no contaminar”, celebrado a finales de junio en Camagüey. El evento se centró en la llamada “economía circular”, un modelo impulsado por las autoridades cubanas para hacer frente a la escasez de alimentos y materias primas mediante el reciclaje y la reutilización de residuos.
Arenayda Manzanares Horta, especialista superior del Grupo de Calidad Ambiental y Economía Circular en Camagüey, explicó que esta iniciativa busca paliar las carencias actuales mediante el reciclado: “Ya se piensa en reutilizar los residuos para elaborar un producto deficitario”.
Durante el evento también se destacaron otras iniciativas similares. La Empacadora Raúl Cepero Bonilla informó sobre el aprovechamiento de tripas, grasas y sangre en la elaboración de embutidos.
Desde hace años, el Gobierno cubano ha impulsado diversas propuestas alimentarias cuestionadas por la población. Hasta la actualidad, los cubanos ya habían tenido que oír sobre moringa, carne de avestruz y jutía, curieles, harina de yuca y cáscaras de papa y melón.
Por eso, no es de extrañar que en marzo de 2022, cuando la emisora Radio Guamá publicó un artículo destacando el “valor nutricional” de la leche de cucaracha, saltaran las alarmas de los cubanos.
Es que la lista de “alimentos” propuestos por dirigentes de la Isla o simpatizantes del régimen comunista, como el brasileño Frei Betto, ya no solo es inverosímil, sino también interminable.
De la moringa a la croqueta de hueso blanco
Una de las soluciones que supuestamente darían al traste con la inseguridad alimentaria en la Isla se debe al fallecido Fidel Castro, quien propuso la moringa como panacea para todos los males. Sin embargo, la población nunca aceptó completamente la moringa, y los campesinos que intentaron cultivarla perdieron tiempo, esfuerzo e inversión, sin lograr los resultados prometidos por las autoridades. Incluso en 2018, el régimen cubano creó la Entidad de Ciencia, Tecnología e Innovación “Sierra Maestra” para materializar las ideas de Castro sobre seguridad alimentaria.
Otra iniciativa controversial fue la promoción en 2019 del consumo de carne de avestruz y jutía por parte del comandante Guillermo García Frías, quien aseguró públicamente que el avestruz producía “más carne que una vaca”, lo que generó de inmediato burlas y memes en redes sociales. En medio de la grave crisis alimentaria que atravesaba ―y aún atraviesa― el país, internautas cubanos calificaron la propuesta como “ofensiva”.
En 2020, el ministro de la Industria Alimentaria, Santiago Sobrino Martínez, defendió el uso de “gallinas decrépitas” y la reutilización de dos millones de metros de tripas de res y cerdo para la elaboración de croquetas. Sobrino aseguró en el programa oficial Mesa Redonda que esta práctica no era propia de países pobres, sino que reflejaba un aprovechamiento típico de “países desarrollados”. Sin embargo, esto generó un fuerte rechazo en la población, que consideró “humillante” la propuesta.