AREQUIPA, Perú – El cuerpo sin vida de Geosvany Fidel Rivalta, joven chofer de taxi cuya desaparición había trascendido hace tres días, fue encontrado cerca de Jovellanos, provincia de Matanzas.
Según reporta Henry Omar Pérez, de la estatal Agencia Cubana de Noticias, el cadáver de la víctima se encontraba en avanzado estado de descomposición al momento de su hallazgo, lo cual sugiere que fue asesinado el mismo día de su desaparición.
“Geosvany salió de Ranchuelo con destino a Matanzas, pero nunca llegó. Conducía un Peugeot 301 gris, con los cristales polarizados, matrícula de turismo T-023092. El vehículo aún no ha sido localizado”, señala el reporte.
La última geolocalización de su teléfono lo ubicó en Palmira, Cienfuegos. Luego de eso, perdió la señal.
El joven taxista estaba a punto de convertirse en padre y ha sido descrito por familiares y amigos como alguien “trabajador y responsable, muy estimado” también por sus compañeros laborales.
Hasta el momento no se conocen más detalles del proceso de investigación del caso o si existen presuntos sospechosos del crimen. Por la desaparición del vehículo en que conducía Geosvany, podría inferirse que el móvil del homicidio fue el robo del auto.

El asesinato de Geosvany Fidel Rivalta se produce en un contexto marcado por un incremento notable de la violencia en el país. El más reciente Informe de Inseguridad Pública 2024 del Observatorio Cubano de Auditoría Ciudadana (OCAC) reporta un aumento del 50,72% en la criminalidad con respecto al año anterior, con un total de 1.317 delitos documentados, frente a los 668 registrados en 2023.
Pese a la magnitud de las cifras, el Gobierno cubano no ha publicado estadísticas oficiales actualizadas sobre criminalidad y, según el OCAC, ha optado por resaltar selectivamente casos resueltos como parte de una estrategia informativa que oculta la magnitud del problema. “Los datos que se presentan son solamente la punta del iceberg de una situación muy mayor y perturbadora”, indica el informe.
Entre los delitos con mayor crecimiento destacan los robos, que aumentaron un 232%; las agresiones, con un alza del 97,1%; y otros delitos diversos, con un incremento del 273,3%. Según el informe, en el segundo semestre del año pasado se llegaron a reportar casi cinco delitos diarios (4,83), en comparación con los casi dos por día del año anterior.
El perfil de los agresores identificados en el informe revela que el 96% son hombres, y el 58% de los delitos fueron cometidos por individuos que actuaron en solitario. Las víctimas directas contabilizadas fueron 527 personas, entre ellas 191 mujeres, 54 menores y 29 ancianos.