MIAMI, Estados Unidos. – El alcalde de Hialeah, Esteban Bovo, junto a otros funcionarios públicos de Florida alzaron sus voces por los más de 1.000 presos políticos que se encuentran encarcelados en Cuba durante una conferencia de prensa realizada este jueves.
Según compartió el propio Bovo en su página de Instagram, el reclamo se llevó a cabo en el condado de Miami-Dade durante un acto celebrado en alianza con la organización Unión Por Cuba Libre.
“Nos unimos para una conferencia de prensa para reconocer a los presos políticos en Cuba durante las históricas protestas del 11 de julio de 2021”, indicó Bovo.
En el evento también participaron el alcalde de Miami Lakes, Manny Cid; el alcalde de Hialeah Gardens, Yioset de la Cruz; así como el miembro de la Cámara de Representantes de Florida Alex Rizo.
“Actualmente, 1.037 presos políticos sufren inhumanamente porque salieron a las calles a exigir libertad, justicia y respeto a sus derechos humanos. Queremos alzar la voz para nunca olvidar a estos individuos que luchan por una Cuba libre”, aseveró Bovo.
View this post on Instagram
Durante el acto, el alcalde de Hialeah recitó los nombres de los cubanos encarcelados y señaló que su tarea era hacer que se escuchen sus voces en el exilio.
“Esto no empieza el 11 de julio; empieza desde 1959 (…). Cuba es una isla esclavizada y siempre lo ha sido desde que los Castro han tomado el mando”, declaró Bovo.
Por su parte, la organización no gubernamental Prisoners Defenders (PD) contabilizó 14 nuevos presos políticos en Cuba durante julio, según consta en su informe mensual, divulgado la pasada semana.
El documento señala que con las nuevas incorporaciones la lista de presos políticos asciende a 1.047, diez más que los registrados al cierre de junio.
“La mayoría de estos 1.047 prisioneros políticos son personas de núcleos familiares civiles no afiliadas ni militantes políticas en grado alguno”, precisa el informe, el cual también recuerda que en Cuba “todos los presos de conciencia y/o políticos son torturados inmisericordemente”.
Desde enero de 2023 la media de presos políticos que entran el listado de Prisoners Defenders es de 17 al mes, tres veces más que las cifras colectadas por la organización en el período 2018-2021.
