CDMX, México. – En Cuba hay, actualmente, 160 personas extranjeras solicitantes de refugio. Los migrantes están siendo socorridos por la Agencia de la Organización de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Según una ficha informativa dada a conocer por la institución, los solicitantes de asilo provienen de más de 15 países. El 50 por ciento carece de estatus legal en Cuba, y el 31 por ciento de ellos son mujeres y niños.
La mayoría de estas personas proceden del Sahara Occidental, Siria, Afganistán, Irán, Sudán y Yemen. Actualmente están solicitando ser reubicados, es decir, que las autoridades cubanas los trasladen a un tercer país.
La ACNUR no esclarece cómo, saliendo de países tan distantes geográficamente, terminaron en la mayor de las Antillas. Sin embargo, al revisar las ciudadanías de los migrantes resalta que provienen de naciones muy pobres y/o con conflictos armados que vuelven más desesperante su situación. Además, sus pasaportes no son aceptados en la mayoría de los países sin tener la visa correspondiente. Por otra parte, Cuba se muestra como un destino más sencillo al cual arribar, donde tramitar el permiso de entrada es rápido y barato.
Según la ACNUR, la crisis socioeconómica de la Isla “limita las oportunidades de integración local de los refugiados y solicitantes de asilo”. Para la agencia de la ONU enviarlos a otro país “es la única solución duradera”.
La ACNUR reconoce que “los prolongados cortes de electricidad y la escasez de gasolina” también afectan las condiciones de vida de estas personas y otros grupos vulnerables. Para aliviar las carencias que sufren los migrantes, la agencia distribuyó 35 lámparas solares y más de 40 módulos de alimentos durante el mes de marzo y abril, según especifica en su informe
¿Cuba otorga asilo o refugio?
La página de la ACNUR aclara que el Estado cubano no es firmante de las convenciones internacionales sobre refugiados. Por tanto, no existe un marco legal ni un mecanismo nacional para la determinación del estatus de refugiado ni para la protección de las personas refugiadas.
Ante esta despreocupación, la ACNUR es la única entidad que se encarga de ayudar a los migrantes e intentar mayormente trasladarlos a otra nación donde puedan regularizarse en condiciones de vida menos precarias. También existe la opción de la “repatriación voluntaria” (regreso a su país de origen).
Debido a la falta de un estatus definido en la Isla, las personas no pueden acceder a empleos ni a medios de subsistencia seguros o alternativas para generar ingresos. Por ello, la ACNUR en marzo y abril “apoyó a más de 150 personas con intervenciones basadas en dinero en efectivo” para cubrir sus necesidades básicas y refugio.
Además, ha prestado asistencia legal en más de 270 sesiones de asesoramiento a refugiados sobre los procedimientos que deben seguir en la Isla.
¿Qué apoyo da el régimen cubano a los migrantes que buscan refugio?
La ACNUR ―según el mismo informe citado― logró por medio de “acuerdos verbales” con el Gobierno cubano que los refugiados y solicitantes de asilo tengan “acceso a educación primaria y secundaria gratuitas”.
Aproximadamente 89 jóvenes, la mayoría de ellos procedentes del Sáhara Occidental, pueden cursar diferentes niveles de estudio, incluido el universitario. La ACNUR proporciona actualmente “pequeñas ayudas complementarias a las becas gubernamentales para estudiantes refugiados del Sahara Occidental” con el fin de cubrir sus necesidades básicas.
De parte del régimen cubano, la oficina de la ONU no obtiene ninguna otra ayuda para legalizar a los refugiados, ni en alimentos u hospedaje.
Actualmente, la ACNUR promueve la adhesión de Cuba a los instrumentos internacionales “de protección de los refugiados y de los apátridas”, así el Estado cubano estaría obligado a apoyar a estos grupos vulnerables que por error o falta de alternativas pisan la Isla, huyendo de sus países.
