LA HABANA, Cuba. – Autoridades cubanas prohibieron las procesiones por Semana Santa en la diócesis de Bayamo-Manzanillo, provincia de Granma, informó a CubaNet una fuente al interior de la Iglesia Católica que solicitó el anonimato.
La negación del permiso fue notificada por Bismar Quesada, quien está al frente de la dependencia en Bayamo de la Oficina de Atención a Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC).
“No dieron explicaciones, nunca las dan; solo dicen sí o no”, detalló la fuente.
La procesión se realizaría por varias calles de la ciudad con los feligreses, quienes suelen acompañar alguna imagen o santo mientras rezan y cantan, explicó la misma fuente. En el caso de Bayamo, las procesiones serían el Domingo de Ramos, el Vía Crucis Santo y el Santo Entierro.
La negativa se conoce una semana después de que estallaran protestas populares en la ciudad de Bayamo, donde los manifestantes cantaron el Himno Nacional y gritaron “libertad” y “viva Cuba libre”, además de exigir “corriente y comida”.
“El Gobierno tiene miedo de que la procesión sirva de pretexto para reactivar las protestas; están tratando de evitar las aglomeraciones”, añadió la fuente consultada.
Este lunes, el párroco Lester Rafael Zayas Díaz comunicó igualmente que el Gobierno de Cuba había prohibido la celebración de la procesión del Santo Entierro el Viernes Santo en la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús, de la barriada del Vedado, en La Habana.
Zayas Díaz aclaró que la notificación, recibida el día anterior “a través de los canales pertinentes”, indicaba la no aprobación de la ceremonia religiosa, que desde hace más de 11 años se ha celebrado, salvo en el período pandémico y en 2023, cuando también fue negado el permiso correspondiente.
De acuerdo con Zayas Díaz, en esta ocasión la negación está relacionada con él mismo, una figura contestataria cuyas homilías “incomodan o ponen nerviosos a algunos”.
La ONG Prisoners Defenders (PD) denunció la prohibición de la procesión en la ciudad de Bayamo y expuso que ello era muestra de la falta de libertad religiosa en la Isla.
“Cuba reprime abrumadoramente la libertad religiosa. Así lo indican cinco mandatos (Relatorías y Grupos de Trabajo) de Naciones Unidas, la última resolución del Parlamento Europeo y organismos como la Comisión para la Libertad Religiosa Internacional de los Estados Unidos”, señaló la organización con sede en Madrid, España.
La Oficina de Atención a Asuntos Religiosos del Comité Central del PCC fue creada en 1985 con el objetivo de controlar las instituciones religiosas y fraternales en el país. Hasta ese momento, esta función correspondía al Registro de Asociaciones, bajo la dirección de Luis Felipe Carneado, quien se mantuvo al frente de la Oficina hasta su fallecimiento, en 1993. Desde entonces, es Caridad Diego Bello quien la dirige.
Todas las instituciones religiosas y fraternales deben informar y solicitar permiso de esta entidad para realizar procesiones u otras actividades.
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