LA HABANA, Cuba. – Este 21 de febrero, durante una rueda de prensa, la Asamblea de la Resistencia Cubana (ARC) hizo pública una carta al secretario de Estado, Antony Blinken, en la cual solicita a la administración Biden incluir a varias organizaciones de masas controladas por la dictadura cubana en el listado de entidades patrocinadoras del terrorismo.
Entre las organizaciones castristas que deberían ser agregadas a la lista figuran el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), los Comités de Defensa de la Revolución (CDR), la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP) y la Central de Trabajadores de Cuba (CTC).
La solicitud de la ARC se basa en la participación abierta y sostenida de tales entidades en acciones represivas y violatorias de los derechos humanos contra el pueblo cubano, especialmente desde el estallido social del 11 de julio de 2021.
La Asamblea asegura en su misiva que el régimen habría utilizado a representantes de estas organizaciones estatales como falsos testigos durante los juicios realizados a cientos de manifestantes pacíficos, además de colaborar con las Brigadas de Acción y Respuesta Rápida (grupos paramilitares leales al poder) para identificar y someter a los participantes en las protestas populares.
Entre los líderes de estas organizaciones de masas la ARC señaló a Gerardo Hernández Nordelo y Fernando González Llort, dos de los cinco agentes cubanos que fueron condenados en Estados Unidos por espionaje en la década de 1990, y liberados durante el segundo mandato de Barack Obama.
Asimismo, la Asamblea de la Resistencia Cubana expresó su preocupación por la cada vez más estrecha alianza del castrismo con Vladímir Putin, y la potencial amenaza que ello implica para la región.
La ARC anunció que su Convención Nacional será celebrada el sábado 25 de febrero de 2023 en el Museo Americano de la Diáspora Cubana. Allí se hará público un Plan de Salvación Nacional trazado por organizaciones de derechos humanos dentro y fuera de la Isla. El evento contará con la presencia de líderes políticos de América Latina, Estados Unidos y Europa para apoyar a la sociedad civil cubana.
