MIAMI, Estados Unidos – El cineasta independiente cubano Miguel Coyula denunció que el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC) había retirado varias películas animadas internacionales de su programación de verano solo porque fueron remasterizadas, en alta definición, por él mismo, crítico del régimen de la Isla y sus instituciones.
La decisión tuvo lugar después de que Coyula compartiera fragmentos de audio de la Asamblea de Cineastas Cubanos del pasado 23 de junio, a pesar de las prohibiciones de grabación establecidas por los funcionarios presentes.
Las proyecciones, que incluían animes japoneses amados por los aficionados cubanos como El pájaro de fuego, Voltus V, Yaltus, Tecnopolicía en acción y Cyborg 009, así como El último unicornio, una coproducción de Estados Unidos y Japón, se habían programado originalmente para el cine Acapulco.
Estos clásicos de la década de 1980 se remasterizaron en alta definición por Coyula, quien también sincronizó las bandas sonoras con las voces dobladas por destacados actores cubanos.
“El trabajo lo hice por amor al arte, pero como siempre, el que se jode es el pueblo”, declaró Coyula a Diario de Cuba.
El ciclo de películas se realiza cada verano desde 2018 y estaba programado para el próximo 16 de julio, coincidiendo con el Día de los Niños en Cuba. Solo El castillo de los falsificadores, remasterizado por otro realizador, se mantuvo en el programa.
Según Coyula, la decisión del ICAIC parece ser una represalia directa contra él. El cine del realizador, que incluye películas como Memorias del desarrollo (2010), Nadie (2017) y Corazón azul (2020), no ha sido exhibido públicamente en Cuba durante la última década, lo que sigue a un patrón creciente de censura y desprestigio por parte de las autoridades culturales cubanas hacia los creadores de obras incómodas.
Esta práctica ha llevado a los creadores cubanos del área a organizar la Asamblea de Cineastas y a exigir el fin de la censura.
