LA HABANA, Cuba.- Desde Entronque de Herradura, en la occidental provincia de Pinar del Río, el activista Eduardo Díaz Fleitas denuncia la situación de un anciano de esa localidad que tras haberse accidentado recibió la negativa para la necesaria intervención quirúrgica en el hospital Abel Santamaría Cuadrado, ubicado en el municipio cabecera.
Se trata de Paulino Olivera González, de 68 años, vecino de Carretera de San Andrés kilómetro 4. El 9 de enero Paulino se cayó de un caballo y se fracturó la cadera. Su familia lo llevó para el también llamado Hospital Nuevo de Pinar del Río, donde les informaron que no podían operarlo porque no disponen de los insumos necesarios para la intervención quirúrgica, además de que el quirófano principal está reservado para uso exclusivo de pacientes en edad pediátrica.
Señala el ex preso político del grupo de los 75 que los familiares de Olivera González llevaron a cabo numerosas gestiones y de esa manera lograron conseguir por su cuenta todo el material necesario para una operación de ese tipo. Y es que los cubanos no tenemos otra opción que intentar “resolver” los insumos sanitarios en el mercado negro, ante la total ausencia de estos en los hospitales destinados al pueblo.
En este caso, lamentablemente, los profesionales de ese centro hospitalario les explicaron a los familiares del anciano que aun así no podían llevar a cabo el procedimiento. Díaz Fleitas aclara que el Hospital Nuevo de Pinar del Río dispone además de un pequeño quirófano para emergencias, sin embargo, según los médicos, el caso de Paulino Olivera González “no es de urgencia” pues a su edad el hueso “puede soldar”. “Lo que está por verse es si se quedará paralítico o cojo”, reflexiona el activista.
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