MIAMI, Estados Unidos. – Este verano, Katie Coldiron, estudiante de doctorado en Historia de la Universidad Internacional de Florida (FIU), y Xu Peng, estudiante de doctorado en Literatura Comparada de la Universidad de Connecticut, están explorando las vastas colecciones de la Cuban Heritage Collection (CHC) de la Universidad de Miami.
Conocida por su inmenso repositorio de documentos, libros, fotografías y archivos de Cuba, la CHC se ha convertido en el archivo más importante de materiales dedicados a Cuba fuera de la Isla. “Honestamente, no creo que pudiera hacer este trabajo sin la CHC”, dijo Coldiron a la Universidad de Miami. “Hay tanto allí. Es el único de su tipo y tienen archivos de diferentes personas y lugares, incluyendo cosas de la Cuba revolucionaria”.
Para Peng, quien nació en China, los múltiples archivos de la CHC han proporcionado puntos de vista únicos sobre la presencia china en Cuba en la mitad del siglo XIX y más allá. “Estaba leyendo un contrato de trabajadores llevados a Cuba en la década de 1860”, dijo. “También estaba buscando obras literarias que no podía encontrar en ningún otro lugar”.
El Programa de Becas de Posgrado de la Fundación Goizueta, lanzado en 2010, proporciona a unos 10 estudiantes de posgrado la oportunidad de pasar de uno a tres meses trabajando en sus disertaciones investigando un tema de interés mientras utilizan material de la CHC. Hasta la fecha, el programa ha apoyado la investigación de 141 académicos emergentes de unas 48 universidades.
“Las Becas de Posgrado de la Fundación Goizueta ofrecen una maravillosa oportunidad para que los académicos se involucren en las primeras etapas del ciclo de vida de la investigación, promoviendo el uso de los recursos de la CHC y contribuyendo al cuerpo más amplio de estudios en Cuban Studies”, dijo Amanda Moreno, directora de la CHC.
Muchos becarios han utilizado los archivos para construir carreras, escribir libros y destacarse en el mundo académico de los Estudios Cubanos. Uno de ellos es Michael Bustamante, profesor asociado de historia de la Universidad de Miami, quien fue becario de Goizueta en 2011 y 2012.
“El programa de becas ha ayudado a hacer de la CHC una parada obligatoria para aquellos que participan en la investigación de disertación relacionada con Cuba y la diáspora cubana”, dijo Bustamante. “También ha ayudado a fomentar la próxima generación de académicos de Estudios Cubanos en las humanidades y las ciencias sociales, como lo demuestra la larga lista de publicaciones significativas de los exalumnos del programa.”
La Fundación Goizueta continúa apoyando el programa de becas y lo considera parte de su misión. “La Fundación Goizueta valora la exploración y difusión de la historia, política y cultura de Cuba en memoria de mi padre, Roberto C. Goizueta, un orgulloso exiliado cubano que se convirtió en presidente y director ejecutivo de The Coca-Cola Company”, dijo Olga Goizueta Rawls, presidenta y directora ejecutiva de la fundación.
Con sus múltiples recursos y su continuo apoyo a la investigación, la CHC no solo preserva la rica historia y cultura de Cuba, sino que también se ha convertido en un pilar fundamental para los estudiosos de la diáspora cubana y de la historia y cultura de la Isla.
