LA HABANA, Cuba.- “Ayuda. Acabo de saber que Thais continúa en silla de ruedas. Dice que tiene inflamación en columna sacra, vértigo, arritmias, asco. En estos momentos la valoró el Dr. del penal y espera ser trasladada mañana a ser valorada por un neurocirujano. Por esos síntomas mi hija puede tener esguince de caderas o algún hematoma en la cabeza producto de la caída. Dice también que por momentos se siente desorientada. El dolor es intenso y solo se le está administrando diclofenaco, lo que le sube la presión arterial”, manifestó a CubaNet Odalis Benítez, madre de Thais Mailen Franco Benítez, la única mujer de los cinco manifestantes del 30 de abril de la calle de Obispo, en La Habana, que permanecen en prisión.
Franco Benítez sufrió una caída en la mañana del 16 de junio último en la prisión de mujeres de Occidente conocida como El Guatao. En la tarde de ese mismo día fue trasladada en silla de ruedas al Hospital Ortopédico Fructuoso Rodríguez de La Habana, en donde, según su madre, “le dijeron que eso no se atendía allí”; entonces fue llevada al Hospital Calixto García, donde solo le dieron calmantes y le recetaron reposo.
A casi una semana de su caída, la activista de derechos humanos continúa en silla de ruedas y con intensos dolores e inflamación en la columna. En el penal solo le suministran medicamentos para el dolor pero ello solo le agrava su estado de salud.
“Me hablaba llorando por el dolor tan grande que tenía. Si es ingreso, pues ingreso, pero a medida que pasen los días peor será el resultado. Estoy desesperada, temo por su vida. Por favor, yo ruego que me ayuden a sacarla”, declaró Odalis, entre lágrimas, luego de hablar vía telefónica con su hija.
La madre explica además que Thais tiene varios padecimientos de salud que agravarían su estado: padece de una escoliosis moderada, lo cual le provoca fuertes dolores en la espalda baja, de hipertensión arterial y de hipertiroidismo.
En casi dos meses de prisión, los tres hijos y el resto de la familia de la activista solo han podido verla en una ocasión, solo les permiten pasarle algunos suministros básicos una vez por semana y algunas conversaciones telefónicas. Su madre asegura tener algunos medicamentos necesarios para sus dolores producto de la caída, pero no le permiten enviarlos hasta dentro de dos días.
Por su participación en la manifestación pacífica del 30 de abril en apoyo al artista Luis Manuel Otero Alcántara, tanto Thais como el resto de los implicados están siendo procesados por los delitos de “desorden público” y “resistencia”, por los cuales pudieran ser sancionados a entre tres meses y cinco años de privación de libertad.
Thais forma parte de los 150 presos políticos que reportados por Cuban Prisoners Defenders en su más reciente informe mensual. Para la organización con sede en España se trata de un récord “tristemente histórico”, y de la llegada una nueva Primavera Negra en el país.
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