LA HABANA, Cuba. – La activista política Eralidis Frómeta Polanco denunció este jueves que el régimen cubano se niega a brindar asistencia médica a su esposo, el periodista independiente y prisionero político Lázaro Yuri Valle Roca, cuyo estado de salud continúa deteriorándose en el centro penitenciario Combinado del Este.
De acuerdo con Frómeta, su esposo, de 60 años, presenta fallas renales, descontrol de la presión arterial, problemas pulmonares, pérdida de dientes, lesiones en la piel y constante hinchazón en los pies. Durante el último mes, precisa, le salieron siete granos en la parte trasera de la cabeza.
“Dice que parecen tumores [los granos en la cabeza] y que le duelen mucho, tanto así que el reeducador lo iba a enviar de inmediato para el hospital de la cárcel”, explica Frómeta a partir de una conversación telefónica con Valle Roca ocurrida este 1 de noviembre.
Sin embargo, sin el consentimiento de la Seguridad de Estado las autoridades del penal no pueden realizar ningún movimiento con el preso político, asegura su esposa. En consecuencia, el día 3 Valle Roca realizó una nueva llamada donde informó a Frómeta que seguía esperando el traslado al hospital.
“Ahí de nada vale lo que diga el reeducador o el mismísimo jefe de la prisión; no se hace nada si antes no lo ordena la Seguridad del Estado o, en el mayor de los casos, Raúl Castro o Díaz-Canel. Se puede morir, como ya ha pasado con presos del 11J”, acotó la mujer.
En el penal apenas hay médicos, amplía Frómeta, pero el 3 de noviembre lo revisó “con muy mala forma” una doctora que “pasó a recoger la jaba de pollo que dan a los militares del lugar. No le hizo estudios, le mandó ciprofloxacina y ya, un antibiótico que es difícil que allí aparezca. Ni siquiera ordenó que le dieran algo para el dolor”.
El periodista independiente también aprovechó la última llamada a su esposa para enviar un mensaje de agradecimiento a Óscar Arias, expresidente de Costa Rica y Premio Nobel de la Paz 1987, quien recientemente lo apadrinó para dar visibilidad internacional a su caso.
“Mi agradecimiento. Es un honor que me haya apadrinado. De verdad me siento muy emocionado y muy halagado de ser el ahijado de una personalidad tan eminente y correcta”, dijo Valle Roca, quien pidió difundir sus palabras de gratitud.
Lázaro Yuri Valle Roca fue detenido el 15 de junio de 2021 y condenado a cinco años de prisión por los presuntos delitos de “propaganda enemiga de carácter continuado y resistencia”. Sus problemas de salud comenzaron cuando se encontraba detenido en Villa Marista, a raíz de una huelga de hambre que llevó a cabo por 17 días para exigir su liberación.
El ayuno prolongado le ocasionó fallas renales y otras secuelas que nunca fueron atendidas. Una sola vez, en febrero de 2022, fue visto por un especialista del Hospital Nacional, quien, para entonces, aseguraba que los problemas renales habían desaparecido sin ser tratados.
En cambio, le diagnosticó un reforzamiento en los pulmones que en la actualidad persiste, según su esposa.
“Ha sido progresivo, una cosa tras otra hasta caer en un estado de salud no compatible con el régimen penitenciario que lleva, y para colmo no recibe atención de un especialista que pueda descifrar el origen de esas enfermedades”, lamentó Frómeta.
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) incluyó la situación del prisionero cubano en un documento aprobado el pasado 30 de octubre, en el marco de la 78 Asamblea General de ese órgano.
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