MADRID, España.- La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en conjunto con la Unión Europea (UE) donó al Gobierno cubano 2 millones 500 mil euros para impulsar un proyecto de producción de semillas en la Isla.
Este proyecto, implementado por el Ministerio de la Agricultura cubano, se centra en ocho municipios clave y tiene como objetivo fortalecer las instituciones y unidades productivas relacionadas con la producción y certificación de semillas, según información publicada en el sitio oficial de la FAO a mediados del mes en curso y confirmada este domingo 21 de abril por el oficialista Granma.
Bajo el nombre de “Modelos pilotos, horizontales de gestión del conocimiento y transferencia de tecnologías en Agroecología” (MAS-DeSIRA), la iniciativa ha estado en marcha desde 2022, concentrándose en el desarrollo e implementación de un sistema de gestión integrado del conocimiento en el sector agrícola. Se espera que este proyecto tenga un impacto directo en la vida de unas 7.200 personas y beneficie a 14 instituciones asociadas, indica el comunicado.
El apoyo incluye la adquisición de maquinaria especializada como tractores, sembradoras automáticas, harneros y clasificadoras de semillas, entre otros equipos. Estos recursos se destinarán a fortalecer instituciones clave y unidades productivas, como el Instituto de Investigaciones Fundamentales “Alejandro de Humboldt” (INIFAT), el Instituto Nacional de Ciencias Agrícolas (INCA), la CCS “Pedro González” y la Estación de Granos de la Isla de la Juventud.
En términos de producción, los centros de investigación INIFAT e INCA se centrarán en la producción de semillas originales y básicas de granos y hortalizas, mientras que la Estación de Granos de la Isla de la Juventud se enfocará en la producción de semillas registradas y certificadas.
La histórica crisis de la producción agropecuaria cubana se ha notado de manera exponencial en los últimos años. En 2022, por ejemplo, solo dos de las 14 producciones fundamentales se cumplieron: maíz y frijol. Con respecto a igual período del año precedente, solo crecieron dos: viandas y frijol.
En febrero pasado las autoridades cubanas reconocieron la inutilidad de la ley de Soberanía Alimentaria en la Isla, implementada por la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) en 2022 como una vía de solución a la escasez, la inflación y el alto precio de los alimentos. Cuando falta menos de un mes para el segundo aniversario de la norma, la precariedad alimentaria no ha hecho más que empeorar.
Las autoridades cubanas culpan de la crisis en el sector agropecuario al embargo estadounidense; sin reconocer la mala gestión del Gobierno, que ha llevado a un marcado deterioro de la infraestructura productiva y a una escasez crónica de insumos. La crisis en el sector agropecuario es una de las principales preocupaciones de la población cubana, que sufre una escasez crónica de alimentos.
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