LA HABANA, Cuba.- Desde el centro penitenciario Combinado del Este, en la capital del país, varios reclusos denuncian una significativa reducción en la ración diaria del arroz que reciben en esa instalación carcelaria.
Varios prisioneros comunicaron vía telefónica que la ración de arroz, ya de por sí escasa, fue reducida a la mitad en días recientes, y según las autoridades del penal es “debido a la escasez de arroz que enfrenta el país”.
De acuerdo con estas declaraciones la dosis faltante habría sido complementada con un poco de puré de papas.
La medida coincide con la llegada a la isla de una donación de 5000 toneladas de arroz procedente de China.
Según refleja el diario oficialista Granma, a partir de una publicación del sitio oficial del Ministerio de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, el donativo se suma a otros enviados por ese país asiático “en apoyo a las labores de enfrentamiento a la COVID-19” y estaría destinado precisamente al consumo social, es decir, a hospitales, escuelas, círculos infantiles, sanatorios, asilos y hogares de ancianos y niños sin amparo filial, comedores comunitarios, comedores de funcionarios y dirigentes, y por supuesto, para las prisiones.
De acuerdo a varios reclusos, el menú en el Combinado del Este suele estar compuesto además de un pan diminuto y una tisana de composición desconocida como desayuno, y como almuerzo y comida un caldo oscuro y salado al cual el personal de la prisión se refiere como “frijoles”, unas tortas de harina, a menudo crudas y en mal estado, y huevos hervidos rancios o podridos. Los brotes diarréicos masivos son habituales en este centro carcelario ubicado al este de La Habana.
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