ROMA, Italia.- Este martes 21 de mayo se habló de Cuba en el Senado Italiano, gracias a la conferencia titulada “Represión, esclavitud médica, mercenarismo e injerencias externas: el insostenible acuerdo UE-Cuba”, organizada por el senador Giulio Terzi, del partido de gobierno “Fratelli d’Italia”; en colaboración con la Federación Italiana de Derechos Humanos, la asociación Las Guerreras Cubanas y el Comité Global por el Estado de Derecho “Marco Pannella”.
La conferencia se llevó a cabo en la sala Zuccari del Palazzo Giustiniani y tuvo como objetivo ilustrar los abusos que continúan ocurriendo dentro de la Isla en manos del régimen comunista, además de resaltar los temas críticos del Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación que Cuba firmó en el 2016 con la Unión Europea y sus Estados miembros. Entre las voces cubanas disidentes destacaron el abogado Marcell Felipe, de la Fundación Inspire America; el coordinador de la Asamblea de la Resistencia Cubana, Orlando Gutiérrez-Boronat; la fundadora de CubaDecide, Rosa María Payá, y la directora ejecutiva de Archivo Cuba, María Werlau.
En el evento también participó la senadora italiana Cinzia Pellegrino, una de las voces más críticas contra el régimen dentro del Parlamento Italiano, quien explicó a CubaNet que esta conferencia forma parte de una serie actividades informativas que viene realizando el partido “Fratelli d’Italia” para mantener alta la atención en torno a la situación de Cuba. “Es una cuestión infravalorada y que también tiene implicaciones notables desde el punto de vista internacional, como hemos podido ver recientemente con la implicación de los jóvenes cubanos enviados mediante engaños al frente de batalla para luchar contra los ucranianos”.
Luego, durante su intervención, Pellegrino aprovechó la ocasión para denunciar que la UE continúa entregando recursos económicos a Cuba a pesar de la opacidad de su uso y a pesar de la continuación de inaceptables abusos de los derechos humanos fundamentales. Además, subrayó que se debe rechazar la solicitud hecha por La Habana de sacar a Cuba de la lista de la UE de países patrocinadores del terrorismo.
“No más recursos”
Orlando Gutiérrez-Boronat explicó que viajó hasta Roma para exponer la realidad que está viviendo el pueblo de Cuba desde su lucha por la libertad y cómo ha transformado al país. Sin embargo, su mayor preocupación son las relaciones económicas entre el viejo continente y la Isla: “Es inmoral, es incoherente que Europa esté ayudando a perpetuar la represión en Cuba”, dijo y pidió interrumpir el flujo de dinero de los contribuyentes europeos hacia el régimen.
“El subsidio europeo al castrismo ha financiado la represión, ha potenciado el dominio de otros países latinoamericanos por el castrocomunismo, y ha posibilitado la plena participación del Régimen Comunista cubano en la invasión rusa a Ucrania”, esgrimió Gutiérrez-Boronat.
“Venimos aquí para solicitar que se corten esos fondos, que se puedan utilizar esos fondos para ayudar a Ucrania. Es importante que se deje de apoyar a una dictadura que apoya a Putin. Europa está cambiando y queremos que sea Italia el líder de este cambio”, indicó por su parte Marcell Felipe.
Al estigmatizar la política de apaciguamiento de la UE, el fundador de la Fundación Inspire America también exigió a los europeos aplicar sanciones al régimen cubano, siguiendo el modelo aplicado a Moscú, Teherán y Beijing, como parte de una alianza global que pretende desestabilizar el orden mundial.
Rosa María Payá informó que sólo en el año 2023 en Cuba ocurrieron 3,000 manifestaciones, “todas reprimidas por la violencia del régimen”. Posteriormente invitó a los Estados democráticos europeos a pedir la retirada de Cuba del Consejo de Derechos Humanos de la ONU y a realizar campañas de sensibilización para que los operadores económicos del sector privado tomen conciencia de las violaciones que se producen a diario en Cuba.
María Werlau propuso una reflexión sobre el impresionante aparato diplomático que tiene Cuba en el mundo, absolutamente desproporcionado con la realidad de la grave pobreza que aqueja a casi toda la población cubana. “Es un trabajo muy efectivo, es una diplomacia hiperactiva, que además se refuerza de un mecanismo de propaganda gigantesco y de la inteligencia cubana”.
Y el diputado ucraniano Maryan Zablotskyi describió las conexiones, por ahora limitadas, entre los militares cubanos y rusos, en donde los cubanos están siendo empleados en el teatro de guerra ucraniano en apoyo de la guerra contra Kiev y, por tanto, contra la propia Europa.
Al respecto, Gutiérrez-Boronat exigió al gobierno de Italia que sea consecuente con su política hacia Cuba: “En primer lugar, es inmoral subsidiar un régimen que viola tan cruelmente los derechos humanos. En segundo lugar, no tiene sentido ser solidarios con Ucrania y ponerle sanciones a Putin y luego alimentar a uno de los más cercanos colaboradores de Putin en la invasión a Ucrania que es el régimen comunista de Cuba”.
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