LA HABANA, Cuba. – Desde el centro penitenciario de máximo rigor de Valle Grande, el cual se encuentra ubicado en el municipio La Lisa, varios prisioneros denuncian una serie de represalias de las autoridades de ese penal contra el manifestante del 11J Pedro Albert Sánchez.
De acuerdo con los reclusos, Sánchez se negó a vestir el uniforme de preso y en su lugar vestía de blanco, lo cual motivó que los militares le negaran el derecho al teléfono y a tomar el sol.
Esas represalias determinaron a su vez que desde la noche del domingo 11 de septiembre el manifestante iniciara una huelga de hambre en reclamo de la restitución de sus derechos, así como de su liberación y la de todos los manifestantes encarcelados.
A través de su hijo, a quien le permitieron verlo el martes 13, se supo que Sánchez se encuentra demasiado depauperado, muy delgado, y también pálido pues no toma el sol desde mediados de agosto, que fue cuando comenzó el castigo.
El profesor de Física y Matemática, de 66 años de edad, tiene cáncer de próstata, cuyo tratamiento quedó inconcluso al ser encarcelado; además sufre de colitis ulcerativa crónica.
A través de otro recluso se supo igualmente que en la propia noche del martes 13 el manifestante se sintió mal y tuvo que ser llevado a la Enfermería, desde donde más tarde lo trasladaron para un calabozo, aislado, sin sus pertenencias, sin colchón y en ropa interior.
Pedro Albert Sánchez se encuentra encarcelado desde el 3 de noviembre de 2021, acusado de los supuestos delitos de desórdenes públicos y desacato, aunque hasta el momento no ha recibido la petición fiscal. Su hijo comunicó también que las autoridades se comprometieron a celebrar el juicio a finales de julio o principios de agosto, pero no fue así.
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