AREQUIPA, Perú. — La famosa Casa del Perro Caliente de 23 y K en el Vedado habanero reabrió sus puertas bajo la gestión privada de una mipyme tras permanecer cerrada al público por varios meses. El pan con salchicha que otrora valía 10 pesos en moneda nacional, ahora cuesta 180.
Un artículo del medio independiente 14ymedio reseña los cambios que ha traído la nueva administración y recoge sobre opiniones de los cubanos sobre Perros Calientes Lalola, nuevo nombre del establecimiento.
Según el reporte, además del incremento de precio en el “pan con perro”, el establecimiento también vende otros productos con precios altos como jugos a 150 pesos, refrescos a 170, bebidas energizantes a 200, maltas a 250 y los batidos a unos 600 pesos.
El local, ubicado frente a la heladería Coppelia, también ofrece un surtido de “combos”, incluyendo el más barato de ellos: dos salchichas con queso gouda, kétchup, mostaza, y un refresco de lata por el precio de 300 pesos.
Asimismo, Perros Calientes Lalola cuenta con servicio de mercado donde un kilo de leche en polvo se cotiza en 1.800 pesos, aceite en 600, yogur de un litro en 500, un kilo de maní tostado a 1.200 e incluso whisky, entre 1.200 y 1.300 pesos.
“Aquí la gente mataba el hambre porque vendían pan con perro muy barato y siempre había tremenda cola. Yo iba los viernes y llenaba mi jaba de pan con perro y la metía en frío para comerlo después el fin de semana viendo televisión”, dijo a 14ymedio un cliente identificado como Ranier.
“Definitivamente parece que van a privatizar todo El Vedado”, agregó el joven cubano en referencia a la ola de privatizaciones en otros famosos establecimientos de la zona, como el BimBom cercano al malecón y el restaurante La Carreta.
Por su parte, Clara, una cubana residente en ese mismo barrio, recordó la Casa del Perro Caliente como uno de los lugares de referencia en la ciudad.
“¿Qué habanero no ha comido pan con perro en este lugar? (…) La gente siempre hacía la cola del Coppelia y como tenían que esperar tanto, cruzaban y compraban el pan con perro para entretener el estómago. Y a todas horas había gente, mañana, tarde y noche”, aseveró.
Tras el auge de la aprobación de las mipymes en Cuba, activistas y periodistas independientes han denunciado que funcionarios del régimen e incluso represores se esconden tras las nuevas empresas, presentadas a la comunidad internacional como “sector privado” en la Isla.
El pasado viernes, CubaNet publicó un perfil sobre Julio Martínez Ramírez, exdirigente de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) y el Partido Comunista de Cuba (PCC), actualmente socio de la mipyme Gran G S.R.L.
Martínez Ramírez forma parte de la oleada de adeptos al régimen cubano, algunos incluso agentes de la Seguridad del Estado, militares o dirigentes partidistas, que han pasado a formar parte del nuevo sector privado en la Isla.
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