AREQUIPA, Perú – El primer coronel Mario Méndez Mayedo, jefe de la dirección de Identificación, Inmigración y Extranjería del Ministerio del Interior (MININT) en Cuba estimó que unos tres millones de cubanos residen en el exterior de la Isla.
Así lo señaló en entrevista concedida a la agencia The Associated Press, en la cual también habló sobre las leyes de migración, extranjería y ciudadanía que serán debatidas por la Asamblea Nacional del Poder Popular en su sesión ordinaria de finales de julio.
Méndez Mayedo informó que según las cifras del MININT, en EE.UU. había, al cierre de abril, 1.300.000 cubanos con residencia, además de sus descendientes, nacidos ya ese territorio y son considerados cubanoamericanos.
En adición, hay otros 300.000 cubanos que permanecen en suelo estadounidense a la espera de regularizar su estatus migratorio y otros más de 100.000 que entraron al país mediante el parole humanitario.
“En los últimos cinco años los cubanos mostraron tener ciudadanía de unos 140 países del mundo”, resaltó.
Y es que por detrás de la gran comunidad cubana en EE.UU. destacan los nacionales de la Isla que emigraron a España, México e Italia, así como el aumento sostenido de la presencia en Chile y Rusia.
Desde 2021 unos 650.000 cubanos se han marchado hacia EE.UU. y otros 100.000 hacia México. Por su parte, el Instituto Nacional de Estadística de España informó que unos 200.000 cubanos viven de forma legal en el país.
Con relación al nuevo proyecto de ley de migración en la Isla, el funcionario defendió que estas “amplían los derechos y permisos de residencia para los cubanos emigrados antes de la pasada década y para los extranjeros que deseen hacer negocios o establecerse en la Isla”.
Desde su anuncio el pasado mes en la Isla, uno de los aspectos que más preocupación ha generado entre los cubanos es el tema de las regulaciones, una práctica arbitraria de represión y castigo del régimen hacia sus ciudadanos.
Al respecto, Méndez Mayedo opinó que “no se puede sacar de contexto (…) Cuba enfrenta una situación de agresividad permanente”, dijo, y añadió que el tema, “en la práctica es discrecional, no es masivo, pero tenemos que sopesar el costo político de evitarle la salida a un cubano y la acción que va a hacer en contra de Cuba”.
Además, el primer coronel intentó justificar las violaciones y políticas de la dictadura castrista al decir que estas leyes “son necesarias debido a los grandes flujos de salida de cubanos en los últimos años”.
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