Pedro Miguel Pérez Betancourt dirigió por años la Marina de Guerra Revolucionaria y también la Aduana General de la República.
El exiliado general Rafael del Pino acusa a GAESA de operar como una corporación privada en paraísos fiscales y llama a los militares a ejercer su “sagrado derecho de insubordinación” para frenar la represión.
El arresto en Estados Unidos del exteniente coronel Jorge Luis Vega García, conocido como “Veguita”, reabre el debate sobre la aplicación de la jurisdicción universal a represores cubanos.
“Antes te daban casa a los dos o tres años de graduarte. Esa era la motivación: te daban muebles, electrodomésticos, comida, reservaciones en hoteles y casas de playa. Ahora tienes que esperar diez años mínimo”.
Es la puesta en marcha de eso que he llamado “Plan B” pero que en realidad es el típico final de toda dictadura de izquierda.
Los padres del joven responsabilizan a los jefes y oficiales por su muerte, señalando los maltratos a los que era sometido.
Aunque cedió la presidencia a Miguel Díaz-Canel a finales de la pasada década, es Raúl Castro quien sigue llevando las riendas de la Isla.
La cadena de decesos anuncian el fin de una era en el castrismo.
Luis Raúl González-Pardo Rodríguez formó parte de la Defensa Anti Aérea y Fuerza Aérea Revolucionaria (DAAFAR).
Era director general de la Unión de Industrias Militares, el conglomerado industrial-militar que se ocupa de reparar el armamento y la tecnología de las FAR.
Pedro Miguel Pérez Betancourt dirigió por años la Marina de Guerra Revolucionaria y también la Aduana General de la República.
El exiliado general Rafael del Pino acusa a GAESA de operar como una corporación privada en paraísos fiscales y llama a los militares a ejercer su “sagrado derecho de insubordinación” para frenar la represión.
El arresto en Estados Unidos del exteniente coronel Jorge Luis Vega García, conocido como “Veguita”, reabre el debate sobre la aplicación de la jurisdicción universal a represores cubanos.
“Antes te daban casa a los dos o tres años de graduarte. Esa era la motivación: te daban muebles, electrodomésticos, comida, reservaciones en hoteles y casas de playa. Ahora tienes que esperar diez años mínimo”.
Es la puesta en marcha de eso que he llamado “Plan B” pero que en realidad es el típico final de toda dictadura de izquierda.
Los padres del joven responsabilizan a los jefes y oficiales por su muerte, señalando los maltratos a los que era sometido.
Aunque cedió la presidencia a Miguel Díaz-Canel a finales de la pasada década, es Raúl Castro quien sigue llevando las riendas de la Isla.
La cadena de decesos anuncian el fin de una era en el castrismo.
Luis Raúl González-Pardo Rodríguez formó parte de la Defensa Anti Aérea y Fuerza Aérea Revolucionaria (DAAFAR).
Era director general de la Unión de Industrias Militares, el conglomerado industrial-militar que se ocupa de reparar el armamento y la tecnología de las FAR.
